No encuentro las palabras para continuar con este post. Querría referirme, en un día como hoy, al papel que la Constitución otorga a los empresarios. Lo siento, pero no puedo. Quizás la semana que viene tengo ánimos para ello. En todo caso sirva este post como homenaje a todos los empresarios que trabajan bajo la lacra del terrorismo, a los que el Estado llena de buenas palabras y nula protección, mientras a posteriori se ceba frente a aquellos que intentan proteger sus bienes y a sus familias. El mejor homenaje que se le puede hacer a Inaxio es que el TAV circule por las tres provincias. Y sin embargo, dados los antecedentes de Lemoniz o de Leizaran no soy optimista.
Agur Inaxio.
Imagen|Chesi