
La lucha por la igualdad de género en el ámbito laboral ha logrado avances significativos en los últimos años, especialmente en lo que respecta a la brecha salarial.
En varios países, las mujeres están cerrando esta brecha e, incluso, en algunos casos, las mujeres jóvenes ya ganan más que los hombres en determinados sectores.
Sin embargo, este progreso no es uniforme en todas las regiones ni en todos los aspectos de la vida laboral y social. En España, aunque se han dado pasos importantes, aún persisten desigualdades en áreas clave como las STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), el acceso a la vivienda y las jornadas laborales.
¿Cómo se está superando la brecha salarial en el mundo?
En el Reino Unido, un fenómeno interesante ha surgido en los últimos años: y es que las mujeres jóvenes están ganando más que los hombres en ciertos sectores.
Una tendencia que se debe en parte a que las mujeres jóvenes están más cualificadas que sus homólogos masculinos. Además, han logrado una mayor representación en sectores tradicionalmente dominados por hombres, como la tecnología y las finanzas. Un ejemplo de cómo la educación y la especialización pueden ser herramientas poderosas para cerrar la brecha salarial.
Noruega, Suecia, Islandia o Dinamarca son otras ciudades de Europa donde la paridad salarial prácticamente ha llegado a todos los sectores económicos.
En España, la brecha salarial se ha reducido en los últimos años, pero aún existe una diferencia significativa entre los salarios de hombres y mujeres.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística, las mujeres en España ganan, en promedio, un 14% menos que los hombres. Sin embargo, en pymes y los autónomos, esta brecha puede ser aún mayor.
Aunque las mujeres están ganando terreno en términos de emprendimiento y liderazgo en pequeñas empresas, todavía enfrentan desafíos únicos, como el acceso a financiación y la conciliación de la vida laboral y familiar.
Desigualdades persistentes en STEM, vivienda y jornadas laborales
A pesar de los avances en la brecha salarial, las mujeres siguen estando subrepresentadas en los campos de STEM. En España, solo el 25% de los profesionales en estos sectores son mujeres, según un informe de la Fundación Cotec.
Esta brecha se debe en parte a estereotipos de género y a la falta de modelos femeninos en estas áreas. Además, las mujeres que trabajan en STEM a menudo enfrentan barreras adicionales, como la discriminación y la falta de oportunidades de promoción.
El acceso a la vivienda es otro ámbito donde persiste la desigualdad de género. En España, las mujeres tienen más dificultades para acceder a una vivienda propia debido a la brecha salarial y a la precariedad laboral.
De hecho, las mujeres tienen menos probabilidades de ser propietarias de una vivienda y más probabilidades de vivir en hogares monoparentales, lo que aumenta su vulnerabilidad económica. Esta situación es especialmente preocupante en el caso de las autónomas, que a menudo tienen ingresos más inestables y menos acceso a créditos hipotecarios.
Qué duda cabe que la conciliación de la vida laboral y familiar sigue siendo un desafío importante para las mujeres en España. Aunque las mujeres están cada vez más presentes en el mercado laboral, siguen asumiendo la mayor parte de las responsabilidades domésticas y de cuidado.
Según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), las mujeres dedican un 26% más de tiempo a tareas domésticas que los hombres. Esto se traduce en jornadas laborales más largas y en una mayor probabilidad de trabajar a tiempo parcial.
En el caso de las pymes y los autónomos, esta situación puede ser aún más complicada, ya que las mujeres a menudo tienen que combinar el trabajo con el cuidado de sus familias sin el apoyo de políticas de conciliación adecuadas.
El papel de las pymes y los autónomos en la igualdad de género
En España, el emprendimiento femenino ha crecido significativamente en los últimos años. Las mujeres representan el 40% de los autónomos y están liderando un número cada vez mayor de pymes, según datos de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA).
Sin embargo, las mujeres emprendedoras enfrentan desafíos únicos, como el acceso a financiación y la falta de redes de apoyo.Además, las autónomas a menudo tienen que lidiar con la precariedad laboral y la falta de protección social, lo que aumenta su vulnerabilidad económica.
Para cerrar la brecha salarial y promover la igualdad de género en las pymes y los autónomos, es fundamental implementar políticas de apoyo específicas. Esto incluye medidas como el acceso a financiación preferente para mujeres emprendedoras, la promoción de la conciliación laboral y familiar, y la creación de redes de apoyo y mentoría.
Además, es importante fomentar la educación y la formación en STEM para que las mujeres puedan acceder a sectores mejor remunerados y con mayor proyección de futuro.
Aunque las mujeres están cerrando la brecha salarial en varios países y están más cerca de conseguirlo en España, aún persisten desigualdades significativas en áreas clave. Los expertos coinciden: solo a través de un enfoque integral y coordinado podremos lograr una verdadera igualdad de género en todos los ámbitos de la vida laboral y social.