Tal y como habíamos anunciado hace un mes en este mismo medio, el Gobierno dio el visto bueno al anteproyecto de Ley de Sociedades Laborales y Participadas en Consejo de Ministros del 24 de abril de 2015, en virtud del cual se actualiza la normativa que había estado vigente desde 1997 con el objetivo de adaptarla a los nuevos tiempos.
Entre las medidas destacadas, cabe apuntar la simplificación de la burocracia requerida para constituir una sociedad laboral, facilitar la incorporación de nuevos trabajadores en condición de socios y conceder un mayor protagonismo y capacidad de control en las decisiones de la sociedad.
En este sentido, se reducen de tres a dos el número mínimo de socios para crear una sociedad laboral durante los primeros tres años de actividad. Asimismo, el texto incorpora los principios de buen gobierno y el impulso de la responsabilidad social en el marco de las sociedades laborales y participadas.
Con el objetivo de delimitar las sociedades laborales de aquellas que no lo son, el texto las define como aquellas sociedades mercantiles cuyos socios deben poseer, al menos, el 50 por ciento del capital social y el 50 por ciento del derecho a voto. Además, el número de horas al año trabajadas por aquellos empleados que no sean socios contratados por tiempo indefinido no puede superar el 50 por ciento.
Además, y como novedad, esta reforma incorpora de manera nítida y clara el concepto de sociedad participada por los trabajadores, lo que sin duda supone un impulso a esta forma de hacer empresa que complementa a las ya existentes tales como las cooperativas y las sociedades laborales.
Se trata de una reforma que debería impulsar la constitución de este tipo de sociedades, que en España ya dan empleo directo a 63.500 personas.
Imagen | Ministerio de Empleo y Seguridad Social En Pymes y Autónomos | Autónomos cobrando la prestación por desempleo...¿misión imposible?