El próximo 1 de julio entrarán en vigor nuevas normas que aplicarán al IVA del comercio electrónico. Su objetivo es facilitar la actividad a las empresas que tienen su actividad online, al tiempo que ponen en marcha una serie de reglas de juego equilibradas con respecto a empresas que operan online fuera de la Unión Europea.
La nueva normativa establece un nuevo régimen uniforme para el comercio de bienes y servicios online, asegurando que el IVA se paguen el país donde se prestan los servicios o consumen los bienes. Hasta ahora, las empresas estaban obligadas a registrarse en cada país de la UE antes de poder vender allí a los consumidores.
Además, la Unión Europea ofrece un sistema más sencillo para declarar y pagar sus obligaciones de IVA a través de la ventanilla única de importación. Este sistema permitirá que se pueda declarar y pagar el IVA con todas las ventas intracomunitarias desde la propia administración tributaria del país donde la empresa tenga su actividad, y en su idioma.
Según la propia Comisión Europea, esta posibilidad equilibra el juego entre empresas comunitarias y vendedores de fuera de la Unión Europea y, al mismo tiempo, incrementará la protección de los consumidores del viejo continente. Por último, también se derogará la exención actual del IVA para paquetes que entren en la UE cuyo valor no exceda de 22 euros.
Este sistema permitirá ahorrar a las empresas en torno a 2.300 millones de euros en costes de cumplimiento, que se reducen en un 95 por ciento, además de simplificar los trámites burocráticos, ya que todas las ventas intracomunitarias se presentan en una única declaración trimestral.