Muchas veces las empresas se quejan de la falta de fidelidad de los empleados. Están dispuestos a dar el salto a otra organización que les ofrezca mejores condiciones dejando atrás años de trabajo conjunto. Lo cierto es que el compromiso entre empresa y empleados debe ser recíproco.
No nos podemos quejar de que abandonan nuestra organización si no tenemos una política de retención de talento. Si no vamos a realizar una contraoferta, será complicado que alguien se comprometa e implique en la empresa como si fuera el trabajo donde va a pasar el resto de su vida.
Ya quedó atrás el tiempo donde uno entraba de aprendiz en una empresa y se jubilaba en la misma. Hoy en día lo normal es que nuestra vida laboral se desarrolle en diferentes organizaciones. Se asumen que si no estamos bien, si en otra empresa de la competencia tenemos mejores condiciones, la fidelidad está con uno mismo, con su familia, no con tu empresa.
El compromiso para llevar un proyecto adelante tiene que ser recíproco. El trabajador está más implicado a medida que la empresa es más pequeña. Si a la empresa le va bien, seguirá teniendo trabajo y posibilidades de mejora. Si le va mal, seguramente acabará en el paro.
Pero la empresa también debe intentar mimar a sus empleados. Que estén contentos, que se sientan valorados y bien retribuidos. Si dan un plus en su trabajo también tienen que recibirlo. La empresa se tiene valorar que estos empleados son parte de su éxito.
Les interesa que tengan un buen descanso, que no estén más horas de las correspondientes en su puesto, que puedan conciliar vida laboral y familiar. Mejores horarios, más facilidad para trabajar desde casa o salir antes los viernes para que el fin de semana se aproveche un poquito más son algunas medidas que ayudan.
Un ejemplo de falta de confianza mutua lo vemos en los planes de formación. No se invierte en mejorar las capacidades de los empleados que no sabemos si mañana van a estar en otra empresa. Si queremos su compromiso, también tenemos que dar algo a cambio y que mejor que invertir en su futuro, y el de nuestra empresa.
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