En torno a las redes sociales y las nuevas plataformas de comunicación para las empresas han surgido muchos mitos que, a fuerza de repetirlos una y otra vez, se convierten casi en verdades absolutas para muchos empresarios. Uno de los factores fundamentales para estos mitos es la inmediatez, la necesidad de conseguir resultados ‘ipso facto’, algo poco compatible con estas herramientas.
La obligatoriedad de la presencia en las redes, la facilidad para la gestión de una marca o las falsas promesas de algunos profesionales 2.0 configuran algunos de estos mitos que resultan peligrosos por cuanto generan unas expectativas excesivas entre las empresas.
“No estar en las redes equivale no existir”. Quizás por la ‘pasión’ de algunos expertos en redes o por la repetición hasta la saciedad de los mismos mensajes, no se deja de escuchar aquello de ‘No estar allí es casi como no existir”. ¿Sí? ¿Seguro? No creo que sea así. Es más, como hemos dicho en alguna ocasión: no todas las marcas tienen por qué tener presencia. Cada firma debe hacer un análisis sobre si necesita estas herramientas para comunicarse con sus potenciales clientes y con sus usuarios o si, en cambio, no compensa.
"Su gestión es pan comido... Lo lleva mi cuñado en los ratos libres’. Que abrir una página de fans en Facebook sea relativamente sencilla o publicar dos fotos en Instagram resulte, incluso, divertido no hace que la gestión de las redes sociales sea algo que se pueda confiar a cualquiera. Sea con alguien de la casa o bien con la externalización a través de una empresa o profesional especializados, deben estar en manos que no puedan convertir esta presencia en un infierno.
Lo de las crisis 2.0 no me va a ocurrir nunca. Es engañarse a sí mismo. Una crisis de imagen de una marca en las plataformas sociales puede ocurrir a cualquiera. Una mala gestión incrementa, claramente, las posibilidades.
Con una buena estrategia, nuestras ventas se dispararán. No hay reglas de tres ni varitas mágicas. Las redes sociales no sirven, fundamentalmente, para vender, aunque sí son herramientas magníficas para ayudar a conseguirlo. Pero no hay milagros.
En unas semanas, ya verás los resultados. El trabajo en redes sociales es a medio y largo plazo. Estrenarse en Facebook y publicar algunos mensajes y enlaces a nuestra web durante las primeras semanas no va a asegurar más ventas en nuestro comercio o en nuestra tienda online. Construir un buen relato de marca en las redes requiere de un esfuerzo enorme que, evidentemente, cuesta dinero.
En Pymes y Autónomos | El corto plazo y la imagen de marca en redes sociales son incompatibles, Si quieres vender como siempre no pises las redes sociales Imagen | Matthew Burpee