Cuando un cliente acude a un comercio online a comprar algo, prácticamente lo primero que mira son las opiniones de otros compradores. Nos fiamos de gente que ha probado el producto, que lo ha tenido en sus manos. Y para el cliente se convierten en una autoridad sobre el tema o producto que opinan. A pesar de ser perfectos desconocidos. Y es algo que llevado al ámbito laboral no se le saca partido, porque es una de las ventajas de poner en valor nuestro conocimientos como profesionales.
Son páginas de ventas, foros, redes sociales, etc. donde se opina y valoran cuestiones que como profesionales tratamos en el día a día. Tenemos los conocimientos y la experiencia necesaria para dar nuestra valoración, pero no ofrecemos este conocimiento a los demás. Y ejercer esta labor de prescriptores nos ayuda a posicionarnos delante de nuestros clientes, ganar otros nuevos y también crear nuestra marca personal.
Pero ofrecer conocimiento a cambio de nada a muchos les puede parecer una pérdida de tiempo. Son muchas horas que dedicaremos a lo largo de los años a sembrar, pero con una cosecha que será incierta. La realidad es que en muchos casos acabaremos por crear una red de contactos, de gente que confía en nosotros, acaben comprando o contratando servicios de nuestras empresas o no.
Lo complicado es elegir cuidadosamente el lugar donde vamos a ofrecer este conocimiento. Y esto depende por supuesto de a qué se dedica nuestra empresa. Para algunas puede ser la tienda de Amazon donde podemos dar nuestra opinión de diferente productos que también vendemos nosotros o para los que ofrecemos alternativas que consideramos mejores.
En otros casos serán las redes sociales el mejor lugar para ir proponiendo revisiones de productos, opiniones o cómo hacer determinadas cuestiones que para nosotros son sencillas porque las hacemos en nuestro día a día, pero para los no habituados pueden ser un jeroglífico indescifrable.
Y en otros casos serían los foros especializados los que marcarían la pauta. Aquí también podemos encontrar a otros profesionales que ofrecen sus opiniones. En cualquier caso, siempre que no estemos de acuerdo es importante no entrar en disputas innecesarias. No se trata de llevar la razón por encima de todo, simplemente de ofrecer nuestra opinión según la experiencia de nuestros años.
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