Muchas personas se han dado cuenta de la utilidad de tener un certificado electrónico durante los periodos de confinamiento. Poder resolver nuestros trámites de forma telemática supone un gran ahorro de tiempo. Pero necesitamos un certifiado digital y para obtener el de la FNMT, hay que pedir cita previa en una de las oficinas colaboradoras para completar el trámite lo que puede demorar mucho todo el proceso. Sin embargo todos llevamos un certificado en nuestro DNIe, pero no lo utilizamos. ¿Es tan complicado? ¿Cómo utilizarlo? La realidad es que utilizar el DNIe en 2020 nunca ha sido tan sencillo.
Lo que necesitamos se reduce a un lector de tarjetas criptográficas homologado, nuestro DNIe con su clave para poder firmar y lo conectaremos a un ordenador. Vamos a analizar el caso de uso con Windows 10, que es el más común hoy en día. Basta conectar el lector, nuestro sistema operativo lo reconoce y lo instala. Un proceso similar a cuando conectamos un teclado o un ratón nuevo, por ejemplo.
Uso del DNIe
Después le llega el turno al DNIe, basta con introducirlo para que pueda leer el chip donde está la información. Y a partir de aquí cuando vamos a cualquier página que nos pide certificado electrónico para identificarnos, reconocerá nuestro DNIe y nos pedirá el PIN.
Esta clave la pusimos cuando nos entregaron nuestro documento en la comisaría y el principal problema que tienen muchos usuarios es que o en su día no pusieron ninguna clave o simplemente no la recuerdan. En este caso tendrían que acudir a su comisaría donde obtuvieron su documento, para identificarse a través de la huella dactilar en la máquina habilitada para poder cambiar el PIN.
No estaría de más comprobar la validez de los certificados. En el caso del DNIe son de cinco años, por lo que depende de la fecha en la que obtuviéramos nuestro documento podrían encontrarse caducado. No es mayor problema, ya que podemos proceder a renovar los certificados allí mismo.
Las barreras de entrada del DNIe
Aunque no recordemos el PIN o no tengamos lector todo el proceso podemos completarlo tranquilamente en unas horas. Para acudir a la comisaría a cambiar nuestra clave del DNIe no es necesaria cita previa, y más allá de las limitaciones de aforo que tengamos es un proceso rápido y que se soluciona en apenas un par de minutos.
El lector lo podemos adquirir en cualquier tienda de informática o comprarlo online para que nos llegue a casa. Y su puesta en marcha está al alcance de cualquier persona que simplemente sepa conectar un dispositivo USB a su ordenador. Es cierto que tener que disponer de un lector o moverlo entre diferentes ordenadores puede ser algo incómodo.
Pero si ya tenemos el DNIe habilitado para operar siempre podemos solicitar también el certificado electrónico de la FNMT, que obtendremos al momento al quedar acreditada nuestra identidad electrónicamente. No necesitamos cumplir con el trámite de acudir a la oficina colaboradora para dar fe de que realmente somos nosotros los que hemos solicitado el certificado.
Para todos lo autónomos y empresas tener el DNIe habilitado y posibilidad de utilizarlo sería un plan B perfecto, ya que en algún momento que tengamos que presentar algo puede que no nos funcione o se haya caducado sin que nos percatemos de ello. En el caso de la FNMT, son dos años el tiempo de vida útil, renovable otros dos sin acudir a la oficina.