En principio vamos a realizar más o menos las mismas tareas con unos que con otro, así que además de una redundancia que nos puede venir bien si falla cualquiera de los dos sistemas, tampoco nos supone mayor ventaja. Lo que si puede ser interesante es para separar vida personal y vida laboral, usando un sistema para cada ámbito.
De todas formas es algo tan sencillo como tener dos usuarios creados, una para cuestiones personales y otro Par profesionales, algo muy sencillo de hacer con Windows y también en las tablets con Android. Por lo que respecta al soporte, es cierto que no prestan demasiada atención a Android como sistema, pero con las aplicaciones no ocurre lo mismo.
Además hay algunos inconvenientes que no me acaban de convencer, por un lado el tiempo de reinicio de los equipos para pasar de un sistema a otro y por otro la necesidad de compartir espacio de almacenamiento entre ambos para recuperar en Windows un archivo que descargamos en Android, por ejemplo.
Con la potencia que tienen los equipos de hoy en día, creo que es más útil tener una distribución Linux instalada en un USB, para poder ejecutarla desde cualquier equipo de similares características o tener un backup perfecto si nos falla el sistema o el disco duro principal.
Los equipos con arranque dual solo los veo como una posibilidad en la empresa, para aquellas que una vez finalizado el soporte de Windows Xp quieran trabajar con Linux como sistema y mantener Xp instalado por aplicaciones incompatibles o que no se pueden migrar, aunque no creo que sea una opción mayoritaria y en todo caso muchas de estas empresas aportarían por la virtualización de Windows para trabajar con Linux.
En Tecnología Pyme | Sistema operativo dual: Windows y Linux instalados en un equipo (II) Imagen | foskarulla