Una de las razones para montar una tienda online es que está siempre abierta. 24 horas al día, siete días a la semana los clientes podrán comprar en tu tienda online. Pero claro, siempre que se compra, esperamos que haya alguien preparando los pedidos, y que estos lleguen a tiempo. Por eso, vacaciones y tienda online es una mala combinación para la mayoría de las pequeñas empresas.
Un ejemplo puede ser el próximo puente de diciembre, justo ahora que tenemos temporada alta de ventas por Navidad. Clientes que tienen más tiempo para mirar y comparar desde sus casas tranquilamente, sin agobios ni aglomeraciones, pero que esperan que sus pedidos lleguen a tiempo para las fechas señaladas.
Seguramente muchas tiendas van a abrir igualmente, por lo que atender a los pedidos que les lleguen desde su tienda online no será ningún problema. Se trata de tenerlo preparado para el primer día hábil enviarlo o incluso si nuestro cliente ha solicitado envío urgente que salga lo antes posible. Es importante cumplir con los plazos que hemos prometido en las condiciones de envío de nuestra tienda.
Pero no sólo van a ser los pedidos. Las dudas que puedan surgir a los clientes que visitan nuestra tienda, que necesitamos contestar si no queremos perder ventas. Estar pendiente de que todo funciona según lo esperado y apoyar las ventas desde las redes sociales, lanzando ideas de regalo para nuestros seguidores o pequeñas promociones.
¿Todo esto supone mucho trabajo? Por lo general va en función de las ventas que tiene nuestra tienda. Si nuestra tienda ya tiene una facturación importante quizás lo que nos interesa es estar al pie del cañón para que no se acumule todo el trabajo. Lo que está claro es que la tienda online no vende sola, no podemos entender el proceso de venta online como un cobro por caja, sino que hay que dar soporte al cliente hasta que su envío llega de forma correcta.
En Pymes y Autónomos | ¿Cuánto tráfico tiene que tener mi tienda online para dar beneficios?
Imagen | Maria Elena