Según un comunicado de ATA que ha hecho público Europa Press durante el mes de enero se dieron de baja en la Seguridad Social 1.239 trabajadores autónomos extranjeros, lo que prepresenta un 0,6% respecto al mes anterior, resultando una cifre de 197.639 cotizantes. De entre los trabajadores autónomos extranjeros sólo los de origen chino son quienes están siendo capaz de afrontar la actual situación económica.
Conforme a los datos facilitados éstos han incrementado su número en 116 afiliados más durante el primer mes de 2011. Por el lado adverso, están los trabajadores de origen rumano que fueron el colectivo que más sufrió este retroceso con un total de 334 afiliados menos.
La evidencia de estas cifras no debe de sorprender a nadie ya que los trabajadores de origen rumano están mayoritariamente vinculados a actividades relacionadas con la construcción, siendo este el sector más castigado en los últimos años, a causa de la burbuja inmobiliaria.
Por otro lado, los trabajadores de origen chino están vinculados a otro tipo de actividades, hostelería y comercio minorista y mayorista, además de su especial adaptación de las tiendas de conveniencia, que en los últimos años por la tipología de sus productos de características más básicas les permite ofrecer productos baratos, que son los que más demanada el cliente cuando la economía aprieta.
Teniendo en cuenta la frialdad de las cifras es indudable que hay que tener muy encuenta el modelo de negocio chino, basado en la simplicidad y la tradición, que parece ser que es el que mejor aguanta los puntos de inflexión del ciclo económico y sin apostar tanto por la creatividad y la innovación.
Via | Europa Press Imagen | slettvet