La llamada huella digital no es otra cosa que el rastro que dejamos en Internet. Por ejemplo, en cada red social en la que estamos dados de alta. En principio, no debería afectarnos a nivel profesional lo que publiquemos, pero nunca sabemos qué nos depara el futuro en el ámbito laboral.
Ayer, un estudio de una empresa de trabajo temporal, se hacía eco de la importancia de controlar y pensar antes de publicar una foto o una reflexión si estamos en pleno proceso de búsqueda de empleo.
¿Es necesario compartir todo?
Una de las redes sociales más consultadas por los responsables de Recursos Humanos es Facebook. Si bien parece una intromisión en nuestra vida privada, si nos paramos a pensar nada es privado en Internet.
Al igual que uno no va por la calle mostrando sus fotografías a extraños, no debería publicar cuestiones privadas que tampoco han de ser exhibidas por una razón: la privacidad también es atractiva.
Muchos usuarios de la red, utilizan páginas como Linkedin o Facebook para buscar trabajo o seguir a una empresa para estar al tanto de sus promociones.
Pero una gran mayoría olvidan cuidar su imagen en Internet. Algo que cobra más importancia entre los profesionales de Recursos Humanos y que les lleva a cambiar de opinión antes de realizar un contrato.
Escaparate laboral
Internet es utilizado para mostrar nuestra faceta más personal, y olvidamos que puede ser un magnífico escaparate profesional.
Las empresas tienden a rechazar a candidatos que si bien poseen un currículum excelente, esa información no se corresponde con la realidad 'gracias' al propio candidato que ha dejado constancia de ello en una red social.
La apología a la violencia, el consumo de drogas y un comportamiento racista o discriminatorio son razones para que se pise el freno antes de contratar a ese candidato que parecía perfecto.
El contacto personal vs presencia en la red
Aunque es importante mostrar una imagen normal y positiva en Internet, los portales web de empleo siguen siendo la primera opción para los reclutadores a la hora de elegir a un futuro trabajador.
Aunque las redes sociales no dejan de ser una opción más que notable para reclutar a posibles trabajadores y que irá en aumento a medida que pasen los años.
No debe suponer ningún obstáculo compartir en Facebook que estamos buscando trabajo, una opción que no es tan empleada por los usuarios en esta red social.
El 95% de los reclutadores afirma que en los próximos años seguirá reclutando personal a través de Redes Sociales.
Un consejo sería emplear la sensatez antes de lanzar un tuit o publicar una foto en la que no ofrezcamos una imagen responsable. Volvemos al inicio: ¿Le mostraríamos a un extraño o conocido una fotografía de un día en el que nos hemos excedido con el alcohol? Compartamos con moderación.
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