Un empresario de Lleida de la construcción, entra con su empresa en concurso de acreedores, y no encuentra mejor solución para salir de la pésima situación económica que atraviesa que atracar cuatro oficinas bancarias pistola en mano. El "presunto" atracador ha obtenido un botín de 80.000 euros. ¿Consecuencia de la crisis o crimen organizado? No han sido uno ni dos, sino cuatro atracos. Premeditados, bien planificados y dignos de cualquier escuela de los bajos fondos de los años negros. Será interesante ver la sentencia cuando salga, para ver si se considera algún tipo de enajenación mental transitoria por la precaria situación de su economía. Como dicen en Mangas Verdes, "Los caminos de la crisis son inescrutables"
Además de este pequeño matiz legal, creo que la reflexión va más allá. Es muy difícil actuar con cordura y mantener la cabeza fría cuando la situación se vuelve insostenible, como puede ser un caso de un concurso de acreedores. Esta situación va a ser más insoportable e insalvable, cuanto más profunda sea la caida, y cuanto más larga sea la agonía.
He repetido varias veces que no se puede prolongar la agonía del moribundo indefinidamente. Si la situación económico-financiera de mi empresa ha escapado del control y se sume en una espiral de destrucción, cuanto antes atajemos esta agonía, menos daños colaterales sufriremos en todas las facetas de nuestra vida, tanto económicas como personales y emocionales.
Vía | El País Imagen | Mermadon 1967 En Pymes y Autónomos | Ante la crisis, sentido común y calma