Posiblemente, la Administración tributaria española dispone de datos económicos de los contribuyentes en un volumen considerablemente mayor que el de los datos a disposición de otras administraciones tributarias europeas o del ámbito OCDE, ¿a que se debe esto?, será que aquí no se fían mucho de nosotros, no le doy otra explicación. Esta muy bien que se luche contra el fraude y que se mejore la gestión tributaria, pero no olvidemos que está la línea que marca el artículo 18 de la Constitución Española, del derecho a la intimidad de la vida personal y familiar. El acopio masivo de información puede rebasar esta línea y cuanto menos merece una reflexión por parte del gobierno.
A la información anterior tenemos que añadirle, la que le pasa las entidades financieras, de cantidades ingresadas en efectivo de más de 2500€, o transferencias de una cuenta a otra de montantes elevados. Las comunicaciones informativas relativas a relaciones comerciales con empresas de fuera de España, los clientes y proveedores con los que operes más de 3000€. Y el famoso modelo 340, donde se detallan todas las facturas emitidas y recibidas. Con las nuevas implantaciones de facturas electrónicas no sé para que van a querer que autoliquidemos nada, simplemente que nos manden una propuesta de liquidación, y la aceptamos o rechazamos sin más.
Lo último que he podido comprobar, en un requerimiento de Hacienda, el cual hacía constar el consumo eléctrico de un hogar. Lo que pone de manifiesto que también recibe información de las compañías eléctricas. Esto cada vez se empieza a parecer más a la novela de George Orwell, 1984. Me gustaría ver a mí el ejercicio de transparencia que realizan los empresarios y contribuyentes de forma reciproca en las administraciones públicas.
En Pymes y Autónomos | LOPD y LSSI imprescindibles para mi tienda online
Imagen | Colin Dunn