Escuchar la palabra ritual suele llevarte ceremonias o actos culturales o religiosos que mantienen un mismo patrón. Pero, no sólo debe circunscribirse a ese ámbito. Esos gestos que se repiten en el tiempo pueden ser muy útiles para la jornada laboral. Para ganar en disciplina y aprovechar mucho más el tiempo. Para ser más productivo.
En otra ocasión hablamos de las rutinas y su efecto positivo en la creatividad. No tienen por qué matarla sino que, si se entienden bien, pueden mejorar la organización del trabajo y ganar tiempo. Un tiempo que puede ser destinado a abrir la mente y plantear las idas y proyectos innovadores que necesita un negocio.
Los rituales son, básicamente, esas rutinas que repetimos a diario y que sirven para afrontar los trabajos de mejor manera. Hacerlo para un tipo concreto de tareas o de situaciones en el trabajo. Ante trabajos importantes, reuniones de equipo o, incluso, en días en los que es más difícil la concentración.
Por ejemplo, Entrepeneur.com plantea cinco rituales para mantenerse productivo durante todo el día. Unos minutos de ejercicio físico, comenzar la jornada en ‘verde’ consumiendo una fruta o verdura, organizar el calendario para lograr pequeñas ‘victorias’ o reservar 15 minutos tras el almuerzo para ‘reenfocar’ de nuevo.
Pero, ¿cuáles son algunos de los beneficios de esos rituales? Depende mucho del uso que se le den y el entorno en el que se haga. Yo destacaría tres generales: allana el camino de la disciplina en el día a día, aumenta la concentración y el enfoque y permite aprovechar mejor el tiempo.
Y tú, ¿qué rituales utilizas en el día a día laboral?
En Pymes y Autónomos | Las rutinas no tienen por qué matar a la creatividad, Lo rutinario no aporta valor Imagen | doryfour