Estoy suscrita a Estilo el manual para nuevos medios. Cada semana me llega un correo donde se reflexiona sobre el uso del lenguaje en la actualidad, de cómo las nuevas tecnologías y nuestro estilo de vida influye en la manera que tenemos de expresarnos. En su página podemos encontrar muchos consejos, entre ellos, cómo expresarnos correctamente en Internet.
Esta semana se hacen cargo de cómo ha de ser la lectura en la pantalla. Es decir, de cómo debemos posicionar nuestros textos en el blog o en la página web de nuestro negocio. Aunque parezca básico, todos hemos tropezado con verdaderos laberintos a la hora de encontrar información en una tienda virtual, o en la página web de un servicio. La usabilidad de nuestra página web o de nuestro blog es casi tan importante como lo que decimos.
En alguna ocasión he leído a Andrés Trapiello criticar los diarios digitales por cómo están expuestos los temas. Sobre todo en la portada. A modo de columnas, sin ningún tipo de jerarquía lógica, podemos leer, un suceso, una noticia económica y un hecho en el ámbito social o la llamada "prensa rosa" en una suerte de puzzle donde las piezas no encajan.
Este aspecto trasladado a una página profesional se basaría en la jerarquía (debe existir) y en la extensión de los contenidos. Si en papel leemos en forma de zeta, en Internet lo hacemos en forma de efe. Cuestión que defiende Jakob Nielsen, experto en usabilidad.
Es decir, no se lee linealmente sino que primero se hace una lectura horizontal en la parte superior de la pantalla; a continuación, la mirada efectúa un segundo movimiento horizontal, más corto, en la zona inmediatamente inferior y, por último, se visualiza la parte izquierda de la página.
Este patrón de lectura permite concluir que escaneamos el texto en vez de leerlo con detenimiento. Si este comportamiento lo trasladáramos a una noticia que hemos decidido subir en nuestro blog, tendríamos en cuenta que cuando se carga la página en la pantalla la mirada se dirige al titular y a la parte izquierda del cuerpo de la información.
Si las primeras palabras de cada línea de texto no resultan interesantes se continúa explorando por el resto del texto hasta dar con algo de interés para el lector.
Algo que resulta obvio es que ahora los lectores no tienen un tiempo limitado para resolver sus necesidades informativas de forma eficaz. La presentación de la página debe permitir una navegación fluida en la que el lector pueda localizar la información de interés que está buscando en el menor tiempo posible.
Como conclusión, haremos hincapié en la calidad de los textos, la síntesis, y la gestión de la información que podrá ser distribuida a través de titulares, palabras clave, ladillos y otras herramientas que ayuden a captar la atención de nuestro lector o cliente y que no prefiera salir porque le resulta difícil tanto leer un texto como llegar hasta el mismo.
En Pymes y Autónomos|Ya tengo un blog: siguiente paso,Tres razones por las que elaborar contenidos de marca en un blog Imagen|oswaldo