Por la experiencia que he tenido con ellas, creo que las BlackBerry con una tarifa plana de datos son una de las mejores herramientas para gestionar el correo en movilidad a las que puede acceder cualquier profesional. Son teléfonos pensados desde el principio para ello y eso se nota, sobre todo en la sencillez de manejo. El problema viene cuando esa supuesta "tarifa plana" que los acompaña no cubre realmente todo el consumo de datos que podemos llegar a realizar.
La gran mayoría de los usuarios no tendrán ningún problema, si utilizan el programa de correo que viene con el teléfono y el navegador incluido para acceder a la web pueden estar tranquilos, están cubiertos por la tarifa de datos que se suele asociar a estos terminales. Los sustos en la factura pueden venir si se instala software de terceros que acceda a la red y que en ocasiones no utiliza el BlackBerry Internet Service (BIS), el canal por el que pasa todo el tráfico de datos de mensajería.
Si se utiliza un canal diferente se puede dar el caso de que no se considere incluido en la tarifa plana, y que con la llegada de la factura nos encontremos con cargos por consumo de datos que no teníamos previstos. Tengo que decir que tras dos o tres años utilizando una BlackBerry (en mi caso de Vodafone) con programas de terceros no he tenido ningún problema, jamás me he encontrado con cargos inesperados por este concepto, lo que no quiere decir que no puedan llegar a producirse.
El caso es que son tantas las aplicaciones disponibles que es difícil no encontrar alguna que necesitemos utilizar, que nos facilite la vida y, oye, para eso están. Tampoco se trata de no aprovechar las posibilidades de nuestro dispositivo, si no más bien de estar atentos a los cambios en nuestra factura al mes siguiente de instalar cualquier programa que pueda hacer uso de nuestra conexión de datos.
Vía | Xataka Móvil