Una de las opciones más interesantes que nos ofrece Internet es la de ser capaces de acceder a productos difíciles de encontrar en tiendas físicas, comparar precios y analizar sus características sin levantarnos de la silla del despacho. Sin embargo, cuando llega el momento de la compra, por muy tentador que resulte hacer click la mejor opción sigue siendo contactar por teléfono con la tienda.
¿Por qué es la mejor opción?, por varias razones. Generalmente los comerciales de las distintas tiendas y marcas disponen de más información sobre el producto de la que aparece en la web, tienen un cierto margen de negociación y en muchos casos un interés particular en apuntarse una venta. Si vamos directamente al click no podremos aprovecharnos de ello.
No tenemos que pensar necesariamente en una rebaja en el precio del producto o servicio, quizá dispongan de algún modelo similar en oferta, puedan incorporar algún extra con la compra o facilitarnos algún tipo de descuento para las próximas adquisiciones que pensemos realizar. Lo que está claro es que no perdemos nada por intentarlo.
Puede parecer paradójico, pero lo cierto es que no es extraño encontrarse con esta posibilidad cuando tratamos directamente con el departamento comercial de cualquier tienda por Internet, y más aún en el caso de compras realizadas por empresas. Estas tiendas saben que la probabilidad de que un negocio efectúe nuevas compras es mayor que la que les ofrece un particular y, generalmente, ofrecen ventajas para intentar fidelizarnos como clientes. Si posees un poco de mano izquierda, practicar el viejo arte de la negociación en las compras por Internet seguro que resulta ventajoso, recuerda que el no ya lo tienes.
Foto | MrPumperni