Pero todo eso tiene solución, a veces ésta parte de nuestra mano pero en otras son nuestros propios empleados los que nos la facilitan pero no sabemos escucharlos. Luego tenemos que aprender a escuchar las peticiones tecnológicas de nuestros empleados.
En muchas ocasiones, nuestras soluciones son tan cerradas que no somos capaces de ver más allá y lo que sería habilitar al usuario para instalar, o hacerlo el propio departamento encargado, una simple aplicación lo convertimos en un ataque sin ver que ese trabajador va a estar más cómodo con ella, haciendo mejor su trabajo o ayudandole al realizarlo.
Por tanto, saber escuchar y estudiar las peticiones, alternativas u opciones que nos platea nuestro equipo es algo fundamental para potenciar la productividad. Un ejemplo que siempre suelo comentar es como cambia la organización de documentos con la instalación de impresoras virtuales. En algunas pyme el gasto de papel se hace tan frecuentemente que lo ven como algo normal e imprescindible. Cuando me han preguntado o les he propuesto usar impresoras virtuales para generar documentos .pdf se han quedado extrañados. Luego, tras proponerles la prueba la satisfacción es total, consiguiendo una mayor organización en los documentos así como ahorro de espacio, papel, tinta y el desgaste de la propia máquina.
Y así podríamos poner miles de ejemplos más, un sencillo editor de imágenes o alguna aplicación para generar sencillos mapas o bocetos son algunos ejemplos que hacen más fácil el trabajo pero que nos cuesta ver por cerrarnos en las soluciones conocidas.
Por tanto, escucha las peticiones de tus trabajadores y compañeros, así como estudia las opciones disponibles. Todo sin olvidar que a veces acciones como bloquear los puertos USB son en muchos casos necesarios. No se trata de dejar las máquinas libres y accesibles 100% pero si de saber fijar los limites con cordura pues puedes estar perdiendo una gran mejora en tu día a día.
En tecnología pyme | El desinterés tecnológico de los empleados