Esto sin duda reforzará las cifras de crecimiento del sector, que año tras año gana cuota de mercado y con ello la confianza de los usuarios que encuentran muchas ventajas en este tipo de alternativa al comercio tradicional. Poco a poco los usuarios que tenían reticencias o desconfianzas van venciendo sus miedos y realizando compras a través de Internet.
Sin embargo muchas son las tareas pendientes que tiene el comercio online por resolver a la hora de ofrecernos un buen servicio. La logística es un apartado pendiente, puesto que finalmente el éxito o fracaso de nuestro negocio dependerá en muchos casos del tiempo de entrega de los productos.
Este año hemos visto ejemplos de cómo funcionan algunas tiendas online, o cómo generar negocio directamente a través de Internet en un restaurante virtual, que no tiene comedor, sólo pensado para ofrecer comida para llevar y que explota en gran medida el canal de Internet como modo de gestionar los pedidos. Muchos pequeños comercios explotan el canal de ventas online con éxito, trasladando parte de sus ventas a este canal y aumentando su cifra global de negocio.
Una mejor automatización de los procesos en la venta online es otra de las cuestiones pendientes en muchos comercios. Crear tiendas desatendidas, que al recibir un pedido de un cliente busquen en el stock y directamente generen el aviso para el transportista y a la vez para que en la propia tienda lo tengan preparado, genere el albarán y la factura es el objetivo a conseguir.
Alternativas para crear nuestra tienda online tenemos muchas, pero a la hora de montar la tienda mi consejo es no atarse a la oferta de un proveedor de hosting. Muchos son los que lo ofrecen entre los productos disponibles. Alojamiento y creación de la tienda online de manera sencilla y rápida por un módico precio al mes.
El problema está en la interoperabilidad, cómo podemos trasladar la tienda online a otro proveedor si no estamos contentos con el servicio. Si no tenemos esta cuestión bien resuelta sin duda es mejor acudir a un profesional que nos monte la tienda online, a ser posible con software libre y autogestionada para poder gestionarla nosotros mismos con facilidad.
En 2011 muchas serán las empresas que se lancen a esta aventura. No hay que volverse locos y sobre todo empezar poco a poco e ir aprendiendo de nuestros propios errores. Además debemos prestar especial atención al clientes, mimando más aún si cabe al cliente de la tienda online que al cliente habitual, puesto que el grado de fidelidad del cliente online es muy alto.
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