La dificultad no está en constituir una empresa


Constituir una empresa es ahora mucho más fácil que hace unos meses, como ya se ha hablado en este blog. Pero ese es sólo un primer paso, el camino está lleno de piedras, con esta entrada no quiero desanimar a nadie, solo señalar algunos de esos obstáculos, para que no tropecemos con ellos más que lo inevitable.

Vamos a ponernos en el papel de dos amigos que quieren montar una S.L.; tienen un poco de dinero ahorrado, pero van a necesitar algo de financiación ajena. Vamos a señalar algunas piedras, por desgracia seguro que me queda alguna en el tintero, en sucesivos posts iremos tratando como nos enfrentamos a ellas.

Después de hacer nuestros estudios de viabilidad y todo el trabajo previo, una empresa no se sustenta meramente en una idea feliz, vamos con los primeros pasos:

  • Hay que elegir un nombre para esa empresa y comprobar que no esté ya registrado.
  • Solicitar un CIF/NIF para esa empresa.
  • Abrir una cuenta (o varias) en la que depositar el capital social de la empresa.
  • Registrar notarialmente la constitución.

Como hemos dicho que va a requerir algo de financiación ajena:

  • Solicitar un crédito, registrarlo, avalarlo.
  • Buscar otras fuentes de financiación, subvenciones, ayudas, con el doble trabajo de buscarlas y luego cumplir los requisitos y formalidades para la tramitación.

La empresa necesita una sede.

  • Puede darse de alta la empresa con sede en el domicilio de uno de los socios, pero no es una solución aconsejable, sobre todo a la hora de cuantificar los gastos.
  • Alquilar una oficina equipada (teléfono, internet, luz, agua, climatización) como sede social es la fórmula más sencilla, y más rápida, sobre todo si no hay que hacer ninguna obra. Se firma un contrato, y se establece como sede.
  • Si se opta por la compra o el alquiler de un local vacío que hay que reformar aparecen nuevas piedras:
    • Proyecto de las obras. (aunque se trate de una obra menor, conviene al menos reflejar en un documento lo que queremos hacer)
    • Solicitud de licencia.
  • Solicitud de apertura, licencia de actividad. (estas solicitudes suelen tener aparejados una serie de trámites burocráticos que cumplir: Ruidos, salubridad, actividades peligrosas…)

Finalmente si necesitamos empleados también habrá que contratarlos:

  • Contratación de empleados, con todo lo que ello implica, altas en seguridad social, etc.

Estoy seguro de que muchos ya habéis pasado por todo esto y os habéis encontrado con estas piedras y más, agradecería que las señalarais en los comentarios, el objetivo de este post no es señalarlas todas (sería inabarcable) pero si dar una idea de las más comunes, para tener sobre aviso a los valientes que deciden emprender.

En Pymes y Autónomos |Se abre el todo a 100 de las empresas
Imagen | Fran Carreira

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