A día de hoy, acceder a un buen curso de formación en materias que puedan ser beneficiosas para la pequeña empresa es sencillo. Algunos son gratuitos a otros, se puede acceder por módicos precios.
En el momento actual, los negocios evolucionan a un ritmo vertiginoso y no siempre se cuenta con los conocimientos para que la rentabilidad o la estrategia de marketing, sean los idóneos. Estar atento a qué ofertan desde nuestros ayuntamientos, u otras instituciones que apoyen al pequeño y mediano empresario, junto al autónomo, es una obligación.
Uno de los propósitos que deberíamos tener todos es aprender. Y en este caso, con un fin concreto: aumentar la cuenta de resultados. Se trata de hacer un pequeño estudio interno y ver en qué nos hemos quedado atrás.
Asistir a cursos nos ayudará a tener una visión diferente del mercado y del sector en el que nos encontramos. Compartiremos ideas, y quizás éstas nos ayuden a mejorar nuestro negocio.
Rodearnos de otras personas en nuestra misma situación, nos aportará algo valioso: motivación. Tan necesaria si queremos emprender un cambio. Dar un salto hacia la novedad. Para que nuestra empresa este año logre despegar.
Nunca es tarde para aprender. Y menos si buscamos conocimientos que nos enriquezcan primero a nosotros, y después podamos trasladarlos a nuestro negocio.
Un ejemplo, de escuela de negocios que plantea el partir de cero, y olvidar comportamientos añejos en el mundo empresarial es Level UP.
Uno de los obstáculos con los que tropezamos normalmente tiene que ver con nuestras limitaciones. Las que nosotros nos ponemos. "No seré capaz", "Me da miedo tomar esta decisión...". En este tipo de cursos se potencia el aprender a comunicar a todo tu público objetivo, quién eres, qué es tu empresa y qué ofreces.
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Imagen|Olga Berrios