Las obras del Plan E han sido y son molestas para los ciudadanos, el tráfico rodado y la actividad económica en líneas generales. Pero tampoco debemos perder de vista la revalorización que implica una intervención de mejora en las zonas adyacentes a los locales comerciales afectados. Estas mejoras, son consecuencia del Plan E, por ejemplo o cualquier otra intervención municipal que se precie. Un impacto de 100.000 clientes me parece excesivo, tanto por la magnitud de la cifra como por la versatilidad de obras que se han puesto en marcha. Se han arreglado zonas en muchas ciudades, cierto, al igual que se han acometido muchos proyectos de nueva ejecución en espacios donde las molestías para la ciudad y su desarrollo son mínimas.
Podemos considerar que el Plan E ha sido o adecuado o no, para la marcha económica general del país, pero no se puede criticar una molestia a corto plazo en duración, cuando va a generar mejores infraestructuras y revalorización a medio y largo plazo. Sin ir más lejos y prueba de la molestia de las obras, la podemos encontrar de forma directa en Jaén capital y las nuevas infraestructuras previstas, sin que el propio Plan E tenga nada que ver con esta situación..
Se ha proyectado la implantación de una línea de tranvía con 4 kilómetros de longitud y casi dos años de ejecución. Esta línea ha matado literalmente a una de las calles que tenía más locales comerciales nuevos. Me refiero a García Triviño (imagen del post), calle en la que han echado el cierre en los últimos meses 10 establecimientos comerciales, bien por traslado provisional, bien por cierre definitivo. Han sido seriamente perjudicados desde luego, pero este ejemplo, sin ir más lejos, no es consecuencia del Plan E, sino de intervenciones públicas de mayor calado.
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