Hace ahora casi dos años, Facebook compraba Instagram. Pagó en torno a 1.000 millones de dólares en efectivo y acciones para hacerse con la red social de imágenes. En este tiempo su crecimiento en usuarios y, también, en actividad de éstos ha sido muy significativo. Un último estudio hecho público por eMarketer es concluyente: logra más interacciones de los usuarios en los perfiles de marcas que en Facebook. Y llega el dilema: ¿es suficiente para introducirla como plataforma en la estrategia de la empresa?.
Ese estudio, hecho público el pasado mes de febrero por la consultora de marketing, confirma que el número de ‘Me gusta’ y comentarios en las imágenes compartidas por las marcas es mucho mayor en Instagram que en el resto de las grandes herramientas sociales (por ejemplo, quince veces más alto que el de Facebook con un 1,53% del total de usuarios).
Quedarse sólo con esos datos sería ver el escenario de manera parcial. Habría que añadir una variable fundamental: el número total de usuarios y la penetración en España. Facebook es ocho veces más grande que Instagram en cuanto a número de personas que lo usan a diario (1.200 millones respecto a 150). En cuanto al nivel de uso en nuestro país, pese a haber llevado una búsqueda no hay estudios actualizados sobre cuántos españoles utilizan Instagram de manera continuada.
Pero, aún tomando esos datos del estudio con cierta distancia, bien es cierto que Instagram cuenta con uno de los ingredientes fundamentales para lograr el ‘compromiso’ de los usuarios en una red social: un enorme potencial visual. En todas las plataformas, las imágenes y los vídeos tienen, por regla general, una aceptación mayor por parte de los seguidores de las marcas.
Por tanto, la conclusión es que no hay nada que impida ‘investigar’ Instagram como una plataforma interesante para las marcas de pequeñas y medianas empresas. ¿Sobre cómo usarlo? En estas líneas hemos dado algunos ejemplos, pero puede haber muchos más mirando a los que mejor lo están haciendo en la plataforma, aunque sean ‘gigantes’ con muchos más recursos.
Puede que el esfuerzo y la dedicación para tener presencia activa en Instagram no merezca la pena para una pyme. Cada empresa debería estudiar sus prioridades. Pero los datos invitan, al menos, a ‘investigar’ a las marcas que crean que puede ser un buen contrapunto en la estrategia de medios sociales.
En Pymes y Autónomos | El poder de la imagen: Instagram, ¿qué es y cómo usarlo en las empresas?