Las últimas noticias no son muy halagüeñas y en los últimos días he oido a dos emprendedores de referencia echar por tierra ese invento de la "marca España", que fuera de nuestro país sólo sirve para los deportistas porque muchas empresas se cuidan muy mucho de utilizarla. Los evidentes obstáculos presentes y futuros no deben quebrar la ilusión de quienes tienen proyectos en ciernes. A pesar de todo hay que seguir con el objetvo de emprender.
Aunque ciertas voces se alzan contra la "moda" de los emprendedores lo cierto es que ni hay muchas otras opciones para encontrar trabajo ni hay otra posibilidad de cambio en el sistema productivo de nuestro país que no pase por la creación de nuevas empresas o porque las que ya existen se lancen a nuevos modelos de negocio que ayuden a superar su situación actual.
La estadistica publicada hoy por el INE muestra que el número de empresas que se crearon en junio ha descendido respecto al año pasado y la tendencia negativa se viene produciendo desde hace unos meses.
Por si fuera poco la misma estadística muestra que cerca del 40% de las empresas que se han creado corresponden al sector del comercio, cuya competencia es enorme y han de enfrentarse con las grandes empresas y los centros comerciales, y al de la construcción y promoción inmobiliaria, con una crisis bestial que no augura que estas nuevas empresas tengan muchas posibilidades de éxito.
En ambos casos se tratan de empresas que centrarán la inmensa mayoría de su actividad en el mercado interno, que sufre una grave contracción del consumo y que probablemente se acentuará con la nueva subida del IVA, lo que suponen riesgos añadidos para el éxito de estos nuevos negocios.
Lo que se necesitan son iniciativas de sectores que puedan ser claves en un cambio de modelo productivo. Las TIC o la biotecnología, sector en el que España podría tener un papel preponderante por el reconocido prestigio de los investigadores españoles, deberían liderar ese cambio así que los emprendedores de estos sectores habrán de dar un paso adelante.
La escasez de crédito y el incumplimiento del Gobieno de su promesa de aprobar la Ley de Emprendedores, que podría incentivar la inversión privada en esos proyectos, suponen un enorme obstáculo para capitalizar las iniciativas, pero eso no ha de suponer un freno para que los buenos proyectos puedan llegar al éxito y liderar el cambio necesario en nuestra economía.
Ante la incapacidad de algunos para poner las condiciones necesarias para el cambio económico en España, han de surgir proyectos que lideren ese cambio. Algunos ya están trabajando en ello y otros han de surgir para acompañarlos.
En Pymes y Autónomos | Da igual cómo lo llamen, las cosas se van a poner más difíciles y hay que prepararse para ello Imagen | SeedRocket_