Recientemente The Accelerators, un blog de Wall Street Journal en el que mentores de startups discuten acerca de las estrategias y retos de crear nuevos negocios, publicaron una discusión en la que reflexionaban si la edad en los emprendedores importa.
Realmente lo que se presenta es una recopilación de artículos que abordan esta cuestión y la razón no es otra que la imagen del emprendedor de éxito es un chaval de veintitantos años, con afinidad por la tecnología que abandona sus estudios universitarios por su negocio. Sin embargo,en 2012, la mitad de los emprendedores de Estados Unidos tenía 45 años según la Ewing Marion Kauffman Foundation.
Estos emprendedores senior, critican que han de enfrentarse a un “sesgo de edad” por parte de los inversores, clientes y partners. Los mentores de "The Accelerators", trataron la cuestión manifestando sus puntos de vista con respecto a la discriminación por la edad.
Pros y contras de la edad
1. Trayectoria vs. tecnología
Los propios inversores reconocen que los emprendedores de más edad y más experimentados les resulta más difícil atraer la atención de los inversores, especialmente en la industria de Internet y dispositivos móviles. Por su parte, los emprendedores más jóvenes, a pesar de no tener experiencia laboral o de dirección, son cortejados por los inversores de capital de riesgo, las incubadoras, los business angels, etc.
La razón que argumenta este hecho es que los fundadores jóvenes compensan su falta de experiencia corporativa y administrativa con su dominio del mundo de la tecnología. Por su parte los emprendedores más maduros no crecieron con smartphones, redes sociales o incluso correo electrónico, por lo que carecen de la intuición necesaria para crear las exitosas empresas y aplicaciones de tecnología para el consumidor del futuro.
2. Experiencia, paciencia y reputación
Si la experiencia, la paciencia y la reputación son la base de las aptitudes del emprendedor, la edad se convertirá en una verdadera ventaja. Los emprendedores maduros comprenden que el éxito a largo plazo requiere paciencia, uno hace grandes apuestas que toman años en materializarse. Las decisiones impulsivas encubiertas bajo una capa de innovación son perjudiciales para el éxito de la empresa.
Desarrollar una reputación sólida exige años, y los emprendedores maduros tienen ventaja ya que, además de los años de experiencia estableciendo contactos y creando relaciones, han cimentado su reputación dentro de su campo.
3. No hay límite de edad para la innovación
Los jóvenes prodigios como Zuckerberg, Jobs y Gates, únicamente lograron el éxito con la ayuda de ejecutivos mayores y experimentados. Un ingrediente clave en la innovación es la habilidad de desafiar la autoridad y romper las reglas. La juventud no duda en cuestionar las normas, pensar fuera de lo ordinario y concebir ideas disparatadas. Pero las grandes ideas en sí mismas no se traducen en tecnologías innovadoras ni en empresas exitosas.
Las ideas se encuentran por todos lados. El valor viene de transformar una idea en un invento y un invento en una empresa exitosa. Para lograr transformar una idea en una empresa de éxito es necesario colaborar con otros, conseguir financiación, comprender los mercados, fijar precios a productos, desarrollar canales de distribución y afrontar el rechazo y el fracaso. Por tanto, se tiene que ser capaz de administrar y motivar a otros, lo que significa, habilidades empresariales y de gestión, así como madurez. Estas vienen con la educación, la experiencia y la edad.
4. Determinar la edad promedio del equipo
Para las empresas más atractivas del mundo en este momento, la edad promedio combinada del fundador, el equipo ejecutivo y los principales inversores y asesores, no suma 25. A pesar de ello, en la fases iniciales, una empresa afronta el riesgo del mercado, el riesgo de la tecnología, el riesgo de la ejecución y el riesgo de la gestión. En esa última categoría, el mayor peligro no es que el equipo sea demasiado mayor, sino que carezca de la suficiente experiencia.
Estas son las conclusiones recopiladas por los distintos mentores que colaboran con The Accelerators y, aunque no se puede establecer una regla de oro, es cierto que los proyectos promovidos por los más jóvenes captan más a la atención que aquellos otros que puedan presentar los emprendedores más senior, aunque estos puedan aportar unas habilidades y capacidades al proyecto que lo hagan más sostenible a largo plazo.
Imagen | Samuele En Pymes y Autónomos | ¿Ser emprendedor implica ser joven?