Después de las cuatro medallas logradas recientemente, a las que hay que añadir dos medallas olímpicas, tres medallas en el Mundial de Barcelona y 25 en la Copa del Mundo,Mireia Belmonte va ganando peso en los medios de comunicación por el sus rotundos éxitos deportivos.
Recientemente estuvo en una jornada celebrada en Madrid por PageGroup, en los que ha desvelado las claves que la han llevado a convertirse en la mejor nadadora española de la historia y tercera a nivel mundial en 2013.
Hay que ser conscientes que cada persona tiene un criterio para definir lo que es éxito, pero con independencia de este hecho, existen diez características que lo definen y que debe incorporar toda persona o empresa para lograr alcanzar este estado. Estas son:
Dominio de la carrera profesional. Saber adaptarse a los cambios satisfactoriamente y tener control sobre las decisiones que se toman es fundamental para lograr el éxito profesional.
Autoconocimiento. Para crecer a nivel empresarial es necesario conocer los límites de cada uno. Detectar y potenciar las fortalezas así como ser conscientes de las debilidades para encontrar una solución eficaz es esencial para alcanzar el liderazgo.
Ambición. Superarse a sí mismo y esforzarse por mejorar cada día es el camino para alcanzar el triunfo. Según Mireia Belmonte, “una bajada de marca en natación es más gratificante que cualquier medalla conseguida, porque significa que nuestro trabajo ha dado fruto y eso es lo que realmente importa”.
Pasión. La llave del éxito es el entusiasmo. Para triunfar a nivel profesional hay que tener claro a dónde se quiere llegar y ser decidido y valiente a la hora de actuar.
Equipo. En una empresa, una comunicación efectiva entre el jefe y sus empleados, así como una buena coordinación entre los miembros del equipo, permitirán que el resultado sea excelente. Respecto a este punto, Mireia Belmonte destacó que “más del 50% de lo que he conseguido se lo debo a mi entrenador. Él es quien me guía en mis entrenamientos, me anima y confío en él por encima de todo”.
Networking. Un buen profesional es social y sabe entablar relaciones con los demás.
Equilibrio. Las personas de éxito disfrutan de su tiempo libre, saben desconectar y tienen vidas estables donde sus familias y amigos desempeñan un papel esencial.
* Autenticidad. Ser fiel a uno mismo y seguir los propios principios definen a un buen líder.
Compromiso. El éxito exige implicarse, esforzarse y actuar éticamente.
Exigencia. La excelencia está estrechamente relacionada con ser detallista y esforzarse cada día por mejorar. El afán de superación es una característica que debe primar en todo deportista de élite y profesional de éxito.
El caso de Mireia ejemplariza estas caracterísiticas para alcanzar el éxito y que de un modo muy sintético se pueden concretar en dos ideas principales, constancia, entusiasmo e inconformismo.
Imagen | Celestine Chua En Pymes y Autónomos | Los principios de Bill Gates