Cuando una empresa se ve en la necesidad de contratar a un nuevo empleado lo primero que tiene que definir es el canal de reclutamiento que considere más adecuado y si no , el que le genere más confianza. De acuerdo al informe sobre "Tendencias en Recursos Humanos, Posiciones y Salarios 2013", el canal preferido por las empresas españolas, son las empresas de selección y las referencias personales.
Respecto al anterior informe es relevante las diferencias en las preferencias por parte de las empresas. Si en el anterior análisis, las empresas de selección contaban con el mismo porcentaje de aeptación, alrededor al 65%, en el caso de las referencias personales ha pasado del 55% al 45%, una diferencia bastante importante.
Desde mi perspectiva, para una pyme o microempresa, desde luego vería más acertado recurrir a las referencias personales que acudir a una empresa de selección. Evidentemente, la credibilidad y la confianza de quien facilita la referencia es fundamental para que la búsqueda prospere.
Quizás resulte demasiado simple, pero a mí si alguien de mi confianza me sugiere una empresa con la que trabajar o una persona con la que contactar la contemplo como primera opción. Si después de un primer contacto, ha habido "química", plantearse más opciones pasa por ser algo similar a deshojar la margarita, al final, lo que se logra es perder tiempo.
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