El registro horario sigue generando controversias en las empresas. También en los trabajadores por diferentes motivos. Pero lo que está claro que aunque esta normativa sea mejorable, el registro de jornada ha venido para quedarse.
Porque hay que recordar que poco después de su puesta en marcha en nuestro país, desde el Tribunal de la UE se dictó la sentencia que obliga a todos los estamos miembros a implantarlo, más pronto que tarde. Por lo tanto todos nos tenemos que adaptar a esta regulación.
Para las empresas es una carga burocrática impuesta. Al menos por el momento, dado que a medida que se desarrollen herramientas más completas para su gestión se irán incluyendo opciones de registro en las mismas. Ahora a cogido un poco a contramano a diferentes desarrolladores de software, pero no tardaremos mucho en verlas incluidas en las herramientas de gestión de las empresas.
Para los empleados también es un cambio de hábitos, pero hay que tener en cuenta que la responsabilidad de llevar el registro es de la empresa. Y de mantenerlo, por lo que si un empleado no ficha, o se le olvida, o no registra sus descansos, la responsabilidad acaba siendo de la empresa.
Además no es algo que esté regulado en convenios colectivos, si se puede imponer una sanción leve, grave o muy grave a un empleado que se "olvida" o "se niega" a registrar su jornada. En todo caso el registro no es objeto de actuación en sí mismo, pero si algo más que se mirará en caso de que mirará en una Inspección de trabajo.
Y muchas empresas que han comenzado a llevar los registros de forma manual ven como esta solución es realmente incómoda, pero sobre todo difícil de mantener en el tiempo y a medida que el número de empleados crece. En todo caso soluciones hay bastantes para poder elegir, y cada organización tiene que encontrar la más adecuada para ellos.