Uno de los sectores que peor lo están pasando a la hora de mantenerse a flote con la crisis del coronavirus es el del turismo. Todas las esperanzas están puestas en el verano y tener una buena temporada. Pero hay tanto que recuperar que muchos confían en tener un largo y cálido otoño donde la gente que no ha podido viajar durante el resto del año se anime a ello. Y dentro de este segmento se encuentran los viajes del Imserso, el clavo al que se agarra el sector para la reactivación económica.
Porque hay que tener en cuenta que tiene unos efectos limitados, solo son determinados hoteles los que trabajan estos viajes organizados que tienen además un beneficio muy bajo, aunque asegurado. Sin embargo suponen ingresos también para todo el sector, desde la empresa de autobuses que se encarga de su traslado o les lleva en las excursiones organizadas, los guías, hasta los restaurantes o tiendas de recuerdos que llevan mucho tiempo sin facturar.
Siempre han sido un turismo de temporada baja, que servía para completar ingresos, para mantener hoteles abiertos sin perder dinero y aprovechar puentes o vacaciones de primavera-otoño donde si era muy rentable si llegaban las reservas.
El turismo en España tiene por lo general un problema de estacionalidad. La rentabilidad en verano, la temporada alta, es tan buena que para muchos no sale a cuenta mantener abiertos sus negocios durante todo el año, porque es cierto que en momento puntuales puede que no sea lo más rentable. Y esto es algo que se tiene que corregir.
Por un lado con mayor promoción para que estos turistas lleguen durante todo el año y no se concentren únicamente en las temporadas de verano. Por otro lado, haciendo que los negocios que se mantengan abiertos durante más tiempo, que generen empleo durante todo el año tengan beneficios fiscales frente aquellos que no lo hacen.
Pero en este momento económico para muchos negocios la solución pasa por estirar como un chicle la temporada de verano aunque el final de esta tenga beneficios menores, pero beneficios al fin y al cabo, que en una temporada normal para algunos serían un porcentaje total muy pequeño, no así en la situación actual.
Imagen | Engin_Akyurt en Pixabay