Son unas iniciales que, quizás, suenen extrañas para muchos pequeños empresarios. Sin embargo, si se traducen al español y se contextualizan, el panorama cambia radicalmente. El BYOD no es más que promover que los empleados utilicen sus propios dispositivos informáticos en el día a día de la compañía, lo que permite, en muchos de los casos, un incremento de la productividad y un ahorro económico.
Partimos de una base que creo que es necesario aclarar: aquí no hay fórmulas universales. Lo que para una empresa es un ahorro, para otra puede no serlo. Tanto en este, como en otros aspectos que hemos tratado en estas mismas líneas sobre la reducción del gasto en la pyme, no hay, en absoluto, uniformidad.
Y dentro de esa contextualización, expliquemos en qué consiste esta modalidad. Como decíamos al principio es una nueva forma de gestionar la infraestructura tecnológica de la empresa, permitiendo el uso de dispositivos propios de los empleados. En este cambio hay dos factores importantes: una mejora de la productividad, puesto que el trabajador se siente mucho más cómodo con sus herramientas, y los adelantos tecnológicos, que llevan a la plantilla a contar, en un buen número de ocasiones, con un equipamiento mucho más renovado.
En ese contexto hay que recordar que su implantación o, al menos, el conocimiento en las empresas va in crescendo. Así, a finales del pasado 2012 seis de cada diez compañías de Estados Unidos o Europa lo apoyaban y respaldaban como modelo para gestión tecnológica.
Pero, ¿por qué se puede ahorrar implantando esta fórmula? Se reduce el coste para equipar a la empresa tecnológicamente, no sólo porque no sería necesaria una renovación tan continuada de los dispositivos, sino porque empresa y empleados comparten el coste de éstos y, en algunos casos, el de la conexión de datos móviles. A esta ventaja se une, como hemos dicho, la mayor comodidad en el trabajo o el incremento de la productividad.
Es cierto que su implantación no es, en absoluto, sencilla ni es posible en todos los casos y empresas. Hay algunos inconvenientes y entre ellos despunta uno: la seguridad de los datos y la construcción de un sistema de soporte para un mayor número de plataformas. Sin embargo, sí debería incluirse como una opción a estudiar por las pequeñas empresas para lograr un ahorro extra.
En Pymes y Autónomos | Ahorrar en la pyme, La tecnología es una herramienta a nuestro servicio y no un fin en sí mismo Imagen | ebayink