Durante años los autónomos han estado peleando por poder desgravarse como gastos afectos a su actividad económica las facturas si por motivos laborales tenían que comer o dormir fuera de su domicilio. Finalmente se llegó a un acuerdo para legislar esta circunstancia, pero se hizo de forma tan ambigua la redacción que en la práctica han resultado inaplicables. Por eso las dietas de los autónomos es una de cuestiones urgentes para resolver ya formado el Gobierno a las que se pueden sumar varias más.
El problema es la inseguridad jurídica que existe con la actual redacción y un criterio de Hacienda muy restrictivo a la hora de aplicarlo. Ante tal circunstancia muchos prefieren no aplicar dicha deducción. Bastaría una redacción más clara para que se puedan deducir las dietas sin mayores contratiempos.
Se ha legislado mal, tan mal que no se puede aplicar en la práctica
Otro de los puntos que están pendientes son las deducciones de los suministros para los autónomos que trabajan en casa, el 30% de los gastos, pero del porcentaje de la vivienda afecto a la actividad económica. Esto lo convierte en una burla, porque de 100 euros de gasto, en una vivienda en la que se dedique una habitación a despacho, podríamos decir que tendría afecto un 10% de la superficie, por lo que el resultado final sería una deducción de 3 euros, razón por la que ya se presentaron mociones para cambiar esta redacción y que fuera más favorable para los autónomos.
Algo similar lleva años ocurriendo con el IVA de las facturas pendientes de cobro. En la práctica el sistema es tan malo que la mayoría de las pequeñas empresas lo dan por perdido. Les supone tal engorro estar en el sistema de IVA de caja que al final desisten de recuperar este IVA no cobrado.
Otra cuestión pendiente es el uso del vehículo particular para cuestiones profesionales. Especialmente importante para autónomos que inician su actividad, que en muchos casos no se pueden permitir comprar un vehículo de empresa. No se puede desgravar el gasto de gasolina si visitamos un cliente pero si nos desplazamos en taxi, no hay problema. No parece lógico.
Es una cuestión de voluntad política. Además en muchos de los puntos los principales partidos están de acuerdo y tenían estas mejoras en sus programas electorales. Esperemos que las luchas partidistas no entorpezcan las negociaciones para sacar adelante estas mejoras tan necesarias para la mayoría de los autónomos.
Pero ya sabemos como funciona esto. Los autónomos están en el centro del debate electoral porque dan muchos votos, pero luego una vez otorgados éstos dejan de ser una prioridad para los partidos políticos. Esperemos que esta vez no sea así.
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