La Consejería de Trabajo y Bienestar de la Xunta de Galicia anunció el pasado viernes que destinará cerca de 20 millones de euros al desarrollo de programas específicos de ayudas para los nuevos trabajadores autónomos, lo que según sus estimaciones esta acción supondrá apoyar la creación de más de 3.000 nuevos puestos de trabajo.
Estas ayudas se enmarcan dentro de la línea de trabajo de apoyo a los emprendedores que está desarrollando en la actualidad y que este año tiene una inversión superior a los 25 millones de euros, unas medidas que se complementan con otras como la puesta en marcha de la Ley del emprendimiento o las iniciativas del Estado en este campo.
En Galicia, según la propia Xunta, los trabajadores autónomos representan más del 24% de las personas afiliadas a la Seguridad Social, seis puntos más que en el resto de España, razón por la cual desean prestar una especial atención a este colectivo por su relevancia para la economia de la región.
Como es evidente, ante las pocas oportunidades que ofrece el mercado laboral cada vez hay más empeño por parte de las distintas administraciones en incentivar el autoempleo. Si bien es positivo, la realidad nos muestra que ni con incentivos ni subvenciones la gente se decanta por el trabajo autónomo. La mejor forma de motivar a la gente por el autoempleo es que el dinero se mueva y, por tanto, haya consumo doméstico y, en la actualidad, la situación es diametralmente opuesta.
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