Hoy es el día de la protección de datos, un día en el que se hace hincapié en la necesidad de cumplir con los procedimientos para que los datos personales, que muchas veces custodian las empresas estén debidamente protegidos. Pero lo cierto es que es una labor que hay que realizar de forma metódica y a lo largo de todo el año.
La AEPD ha presentado diferentes materiales para ayudar a la pequeña empresa a cumplir con el nuevo reglamento europeo de la Protección de Datos. Dicho reglamento entró en vigor el pasado 25 de mayo de 2016 y será de obligado cumplimiento en 25 de mayo de 2018. Lo cierto es que parece mucho tiempo, pero lo más probable es que muchas lo dejen para el último momento.
Lo cierto es que muchas pymes incumplen uno de los principios básicos de la seguridad, el del mínimo privilegio. Es decir, cada usuario tendrá los privilegios suficientes para acceder a los datos y aplicaciones que le permitan realizar su trabajo, pero nada más. En muchas ocasiones para evitar problemas todos pueden acceder a todo, instalar, copiar, etc.
Esto provoca en muchas ocasiones fuga de datos, un tratamiento de los datos inadecuado, ya que a pesar de cumplir con el reglamento de la protección de datos, se pueden crear sin que el responsable del fichero sea consciente múltiples ficheros con datos personales de clientes.
Si a esto le unimos que todo el mundo conoce la contraseña del otro, que no existe una posibilidad real en la auditoría de los accesos, al final sobre el papel puede que se cumpla la ley, pero en la práctica existen muchas dudas sobre el tratamiento de estos datos. Y eso en el mejor de los casos.
Porque en otros simplemente se desconoce la ley, se guardan datos personales de clientes, de trabajadores en discos duros virtuales, tipo Dropbox, pero con cuentas personales de otros empleados, que sincronizan sus datos en ordenadores de casa, smartphones, etc.
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