¡Esto es el colmo! Resulta que la Campaña del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo del Gobierno de España emitida en televisión este año dice entre otras lindezas, textualmente lo que sigue:
“... No se me enojen, pero a los españoles siempre les pilla el toro“
“... Reconozcámoslo, siempre dejan todo para el último momento, el pasaporte, la ITV, los exámenes…”
“... Ya verás como al final todo son prisas, colas, nervios...”
Después que a uno le llamen todo lo que acabo de citar textualmente ¿Cómo se puede sentir? Yo sinceramente aún no puedo asimilar semejante disparate.
Veréis no sé que pensáis vosotros, pero si éste es el concepto que de los españoles tiene el propio gobierno de España, ¡Estamos apañados! Una de las características fundamentales que debe estar presente en todo buen dirigente es indudablemente la confianza en sus colaboradores. No pido que sea ciega, pero sí al menos un poco miope.
Con independencia de cuál sea la opción política del sujeto responsable del anuncio, pues el post hubiera tenido idéntico contenido, el hecho de criticar la propia esencia de los ciudadanos que se dirigen no hace sino confirmar que la salida de la crisis va a ser irrealizable. ¿Creéis que una empresa puede funcionar bien con un líder que no confía en las aptitudes de todas y cada una de las personas que intervienen en el proceso productivo? Os lo voy a poner más fácil teniendo en cuenta el entorno económico actual ¿Creéis que una empresa puede salir airosa de una situación de crisis si el líder, además de no confiar en sus colaboradores les dice públicamente que lo hacen todo tarde y mal? Obviamente la respuesta es NO.
Entusiasmo, confianza, seguridad (no sólo en uno mismo sino en los demás) deben ser conceptos inherentes a liderazgo. Un liderazgo basado en la generosidad permite a sus receptores que ante sucesos imprevistos o nuevos se tomen decisiones y que a la vez se sientan capaces. Dirigir de forma que los colaboradores se sientan más responsables, más idóneos, útiles y competentes no hace sino acrecentar la competitividad sana y el logro. Mandar resaltando los errores y centrándose en el control es un tipo de jefatura añeja que no hace sino distanciar desmesuradamente voluntad y resultado.
A los que os parezca un post que nada tiene que ver con el mundo empresarial, os diré que confianza y liderazgo son términos que deben estar presentes día tras día en los negocios. Partiendo de la base que tal vez yo también lo hubiera pensado, me pregunto el porqué. Creo que la respuesta es que “empresa“ y “estado“ están tan lejos conceptualmente en cuanto a su modelo de gestión que cuando se habla de uno de ellos parece excluirse el otro. El día que esa diferencia no sea tan salvaje, siendo necesariamente moderada, las cosas marcharán mucho mejor.
En definitiva, animo a los responsables de la campaña que para futuros trabajos sean más serios, más positivos, mejores y sobretodo mucho más generosos si se trata de definir a los ciudadanos que representan este país. La pregunta que todo buen dirigente se haría para mejorar (si fuera cierto que lo dejamos todo para el último momento) sería ¿En qué me estoy equivocando si se hace todo a última hora?
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