En caso de que una empresa reciba una notificación de la Agencia Tributaria para que ejecute un embargo de salarios o de créditos está obligada a retener esas cantidades e ingresarlas en Hacienda. ¿Se aplica también a las dietas a pagar?
Una consulta vinculante aclara este extremo. En principio la consulta se refiere al caso de un miembro del consejo de administración de una sociedad y se pregunta si las dietas a pagar a esta persona deberían embargarse atendiendo al requerimiento de la Administración, pero la contestación de la Dirección General de Tributos se puede asimilar al caso de dietas pagadas a empleados o proveedores que trabajen para una empresa.
Lo que determina la resolución es que las dietas también son embargables. Se basa en que establecen como bienes embargables:
El dinero efectivo o en cuentas abiertas en entidades de crédito.
Los créditos, efectos, valores y derechos realizables en el acto o a corto plazo.
Los sueldos, salarios y pensiones.
Los bienes inmuebles.
Los intereses, rentas y frutos de toda especie.
Los establecimientos mercantiles o industriales.
Los metales preciosos, piedras finas, joyería, orfebrería y antigüedades.
Los bienes muebles y semovientes.
Los créditos, efectos, valores y derechos realizables a largo plazo.
En el caso del miembro del consejo de administración, que sería de aplicación también a los proveedores, las dietas tendrían la consideración de créditos, efectos, valores y derechos realizables en el acto o a corto plazo. Por tanto, independientemente de que esa cantidad corresponda a la compensación de un gasto justificado, los importes a pagar en concepto de dietas también serían embargables.
En el caso de los trabajadores se entendería que las dietas se incluirían como un concepto salarial, así que tendrían el mismo tratamiento y resultarían sujetas a embargo. Siempre teniendo en cuenta los porcentajes a aplicar como embargo según la cuantía del salario.
En Pymes y Autónomos | El embargo de créditos de proveedores Imagen | JuanJaen