La reunión de ayer de la Ministra de Trabajo con las diferentes asociaciones de autónomos fue una puesta en escena de la idea de diálogo social con los representantes de este colectivo. Muchos son los problemas que tiene el sector, pero ayer ya se mostraron algunas de las promesas para empezar a solucionarlos, más facilidad para acceder al paro y combatir a los falsos autónomos.
El cese de actividad de los autónomos es una de las coberturas por las que hasta el año pasado era voluntario cotizar, pero que ahora son obligatorias. Siempre ha sido polémico por el alto porcentaje de peticiones denegadas, históricamente más del 50%. La ministra Yolanda Díaz ha prometido solucionar esta cuestión, flexibilizando las condiciones de acceso. Parece que el diagnóstico ya está hecho, ahora solo falta aplicar medidas eficaces.
La lucha contra los falsos autónomos va a continuar. Una figura de la que muchas empresas ha abusado para abaratar sus costes laborales a la vez que menguaban los derechos laborales de los trabajadores que tenían contratados.
El otro punto controvertido está en los TRADE, los autónomos económicamente dependientes, que reciben un 75% de sus ingresos o más de un mismo pagador. Solo se encuentran inscritos dentro de esta figura 9.000 autónomos, cuando las estimaciones son de más de 140.000 existentes. Lo que no se hará es crear la figura del TRADE digital.
Interesante es la propuesta de actuar de forma diferente según el tipo de colectivo. Para el Ministerio el colectivo de autónomos es muy heterogéneo y no se puede aplicar la misma fórmula para todos, ya que no todos los inscritos en el RETA tienen las mismas necesidades.
Por último es destacable el apoyo a la formación de los autónomos como una forma de mejorar la competitividad y la innovación del colectivo. Dotar de recursos de formación, independientemente de si el autónomo se encuentra en una zona rural o una gran ciudad será una de los factores a tener en cuenta.