Siempre se ha dicho que uno de los frenos en España para emprender era el miedo al fracaso, y de ahí el intento por quitarle hierro. Pero hay que tener cuidado y evitar caer en la sobrevaloración del fracaso.
En este sentido son muy recomendables el post y el video (que contenido en el primero voy a citar a continuación). Empecemos por el final, por el video de Carlos Polo, emprendedor con éxitos y fracasos a sus espaldas, en un evento de Multiplikdor.org:
Sí, yo también tengo la sensación de que hay una cierta épica del fracaso, con un rollo romántico y de que parece que con el fracaso tampoco pasa nada. Los fracasos son muy duros, son experiencias personales de las que son difíciles aprender en cabeza ajena.
De la charla de Carlos me quedo con el no autoflagelarnos con eso de no hablar del fracaso. Incluso en países como EEUU nadie habla de fracasos anteriores si posteriormente no ha tenido éxitos. No somos tan diferentes (eso sí que es una excusa ideal para no emprender, el que otros son mejores que yo)
Este video está inserto en un post, La sobrevaloración del fracaso, del muy recomendable blog Sintetia, en el que se nos narra el "duelo" por un fracaso empresarial en primera persona. Nada mejor que sus propias palabras para condensar sus conclusiones:
Qué queréis que os diga, me parece que Carlos Polo tiene razón cuando dice que el fracaso está sobrevalorado. El fracaso no nos deja resignados, pero sí con un gusto amargo transitorio. Pues eso. Hacer el duelo corto y a volver a empezar con otros proyectos y a demostrarnos que este es un deporte de equipo que se debe jugar alrededor de clientes reales y no de subvenciones. Lo sabíamos, pero saber las cosas, no es suficiente.
El fracaso enseña, y enseña mucho, pero procura aprender por otras vías. Y sí aún así caes, estate preparado para digerirlo.
Más información | opinno, Carlos Polo Gil
En Pymes y Autónomos | La cultura del fracaso, El fracaso empresarial es el primer paso hacia el éxito
Imagen | Chris Griffith