Hay muchas asignaturas pendientes en España en materia de emprendimiento. Una de ellas es la gestión del fracaso empresarial y las dificultades para superar el cierre del negocio. Esto se pone de manifiesto en la estadística que indica que el 64% de los emprendedores españoles que fracasan no lo vuelven a intentar.
Esto contrasta con la mentalidad anglosajona al respecto. Para ellos el fracaso se identifica con el aprendizaje y la experiencia. Una persona que fracasa se hace más sabia y puede volver a intentarlo con otra perspectivs, lo que le lleva a cometer menos errores. Aquí sin embargo el fracaso es una losa y desde luego está muy lejos de considerarse como una experiencia positiva.
Desde mi punto de vista esto viene inducido porque realmente aqui hay muy poca mentalidad emprendedora y los que lo intentan son más por necesidad que por vocación.
Además el lanzamiento de una nueva iniciativa empresarial en España suele llevar aparejado un endeudamiento que el emprendedor arrastrará durante años y que impedirá, a los que pudieran tener intención de volver a intentarlo, generaEl problema r nuevos recursos en las iniciativas posteriores. Esto contrasta con una de las premisas más importantes que se les repite como un karma a los emprendedores, “si vas a fracasar, fracasa rápido y fracasa barato”.
El problema es que la mayor parte de los proyectos emprendedores necesitan una gran capitalización antes de generar recursos y muy pocos se lanzan a modelos low-cost con gran capacidad de crecimiento que necesitarían capital para aumentar de tamaño y una vez que ya están generando ingresos.
Desde luego si partimos de la base de que el índice de vocación emprendedora en España es muy inferior a la media de los paises desarrollados, que la inmensa mayoría de las empresas que se crean apenas llegan a sobrevivir cinco años y que los que fracasan no suelen volver a intentarlo, tenemos una ecuación diabólica que hay que cambiar por el bien de la estructura económica de nuestro país.
En Pymes y Autónomos | La gestión del fracaso empresarial
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