Esta pregunta es una constante en todos los empresarios. Existen muchos sectores en los que para crecer no sólo hace falta vender más, sino también tener personal que pueda dar salida a toda esa nueva necesidad de producción.
Claro, pero entonces, los beneficios que tendremos por esas nuevas ventas se verán anulados por las nuevas contrataciones de personal. ¿Qué hacemos?
Difícil respuesta, todo dependerá del core value empresarial.
Si somos una empresa pequeñita con unos clientes, relativamente fijos, con una facturación constante en la que la posible y escasa marcha de clientes se ve compensada por la incorporación de nuevos clientes en igual número, posiblemente no queramos dar el salto. Ya se sabe: Virgencita, virgencita, que me quede como estoy.
Pero, si queremos explotar todas nuestras posibilidades, ampliar negocio, no tendremos otro que ampliar nuestro personal. Y aquí viene el quid de la cuestión. ¿Cómo valoramos nuestras necesidades de personal? ¿Seguro que no es posible producir más con la plantilla actual? ¿Qué hago?
Como siempre en el mundo de la consultoría no hay una respuesta firme y unánime. Depende del caso. Hoy por ejemplo, leía hoy en el diario Negocio que el despacho de abogados Garrigues (uno de los principales actores jurídicos en España) se encuentra en esta tesitura. Según la Memoria Anual 2007 presentada por el citado despacho, Garrigues logró un incremento de la facturación en un 14,6%, pero para lograr dicho incremento tuvo que aumentar el gasto de personal en un 22,3% ¿asumible?
En este supuesto, quizá no tenga otro remedio, el sector jurídico es uno de los más competitivos, y si no creces, tus competidores lo harán por ti (se harán con tus clientes). Este es el motivo de Garrigues para incrementar su plantilla, independientemente de que suponga un mayor coste (obviamente no están en pérdidas ni tienen una situación financiera crítica, y menos en los tiempos que corren).
Y tú ¿qué haces? ¿creces o te mantienes?
Investiga cuáles son tus motivos para optar por una opción u otra.