Este martes se ha aprobado la publicación del Anteproyecto de Ley para la Creación y Emprendimiento Empresarial en Consejo de Ministros, que se elevará a consulta pública para su aprobación definitiva. Se trata de una de las leyes más ambiciosas para cambiar el paradigma empresarial español, tan dependiente de la burocracia administrativa, y así facilitar la creación de empresas y su crecimiento.
El anteproyecto se asienta sobre tres pilares fundamentales: la agilización de los trámites para la constitución de una sociedad, la financiación del crecimiento empresarial y la lucha contra la morosidad.
Agilizar y facilitar la creación de empresas
Como ya habíamos adelantado, esta nueva ley facilitará la constitución de empresas sin ningún mínimo de capital social. Es decir, se podrá crear una empresa con un euro, si bien se articulan otros mecanismos para facilitar que los acreedores puedan recibir su dinero en caso de quiebra de la sociedad.
Asimismo, se facilitarán los trámites para su constitución, para lo cual se traspondrá una Directiva europea que obliga a los estados a facilitar el registro electrónico y que cualquier emprendedor pueda poner en marcha su empresa de forma totalmente digital.
Financiación del crecimiento empresarial
Entre las actuaciones que se establecen en el anteproyecto de ley, se contempla el impulso del fondo NextTech, destinado a financiar las iniciativas de innovación y tecnología. Se trata de un fondo con capital público-privado cuyo objetivo es proporcionar capital para iniciativas disruptivas.
Asimismo, la ley pretende reforzar la regulación de las plataformas de financiación participativa.
Lucha contra la morosidad
El tercer pilar sobre el que se apoyará esta ley es un mecanismo para la lucha contra la morosidad en las empresas, mejorando la regulación actual y creando un Observatorio de la Morosidad dependiente del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo que tendrá como objetivo analizar las estadísticas de las compañías españolas.
Además, se hará hincapié en la información, para lo cual se fomentarán mecanismos como el uso de factura electrónica, en consonancia con los avances en digitalización con el objetivo de que prácticas como esta faciliten el acceso a más información de forma ágil y fiable.