A menos de dos meses de las Elecciones Generales, los principales partidos políticos con posibilidad de obtener representación parlamentaria siguen presentando sus medidas. Y dos de ellos son los que más están centrando las críticas de la opinión pública: Ciudadanos y Podemos.
Desde que se emitiera el cara a cara entre estos dos candidatos en LaSexta, sus principales propuestas han sido examinadas con lupa siendo dos, especialmente, las que más debate han generado: el complemento salarial de Ciudadanos y el aumento del Salario Mínimo Interprofesional que propone Podemos (y también el PSOE). Evidentemente, una de las mayores preocupaciones de los españoles es el desempleo y la precariedad laboral, y estos partidos se están centrando en la solución de estos problemas. Pero, ¿cuál de estas dos propuestas es mejor?
La receta de Ciudadanos: un complemento salarial para los trabajadores con sueldos más bajos
Se trata de un complemento a nuestro salario dentro del IRPF que permitiría aliviar la carga a las rentas más bajas. A falta de concreción efectiva por parte del partido de Albert Rivera, consistiría en un impuesto negativo cuya transferencia se realizaría a través de la declaración de la renta, acompañada de una sustancial reforma del IRPF en la que todos los tipos se rebajan (más a quien menos tiene), según una tabla que su equipo ya ha elaborado.
El coste propuesto por el partido de Rivera es de 7.800 millones de euros para el complemento salarial; cerca de 4.350 millones de euros para la reforma del IRPF y otros 442 millones de euros para otro complemento salarial de las pensiones. En total, 12.592 millones de euros. Analizaremos más tarde el impacto de esta rebaja impositiva.
La subida del SMI, una medida recurrente entre Podemos y el PSOE
Podemos, por su parte, ha propuesto un aumento del SMI, aunque en ningún momento ha especificado cuál sería su cuantía ni el plazo de tiempo para conseguirlo. Sí lo ha hecho el PSOE, que ha establecido un Salario Mínimo Interprofesional de 930 euros, el 60% del salario medio, que se produciría a lo largo de las dos próximas legislaturas.
¿Cuál de estas dos medidas es mejor?
Personalmente, ninguna de las dos medidas me parecen idóneas para acabar con el paro ni la precariedad. Por un lado, porque la fijación por decreto de un salario mínimo, aunque suene muy bien y es muy popular, puede acabar teniendo consecuencias desastrosas para la economía, a través de más destrucción de empleo, ya que no todos los empresarios podrán asumir este aumento de costes en sus empresas.
Por su parte, el planteamiento del complemento salarial me parece interesante, pero no hay que olvidar que se trata de una medida muy costosa para las arcas públicas que es necesario financiar. Además, los empresarios podrían acabar ofreciendo sueldos más bajos, conscientes de que el estado se encargaría de complementar las nóminas de sus empleados, por lo que el coste de esta medida se podría disparar.
Ahora bien, es de justicia añadir que estas medidas han de complementarse con el resto de propuestas. El contrato único, la mochila austríaca y la reforma del IVA en el caso de Ciudadanos o una reforma fiscal progresiva en el caso de Podemos y el PSOE son las que más han sonado. Ahora bien, una cosa es pregonar y otra bien distinta dar trigo, y habrá que esperar a 2016 para saber si efectivamente estas propuestas no quedan en papel mojado. En dos meses lo sabremos.
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