Según el II Barómetro InfoJobs sobre Preocupaciones de los españoles en relación al empleo el cierre de empresas y la pérdida de puestos de trabajo y salario son las principales preocupaciones de los trabajadores durante la pandemia del COVID. Previamente a esta crisis económica, la principal preocupación era no tener un salario acorde a nuestra formación y experiencia que ahora ha pasado a un segundo lugar.
Dos de cada tres trabajadores en activos están muy preocupados por el cierre de las empresas y cómo esto afecta al empleo o la posibilidad de perder el puesto de trabajo. Especialmente el paro preocupa a los mayores de 45 años, puesto que reincorporarse al mercado laboral luego no es tan sencillo. También hay que tener en cuenta que en este sector de la población preocupan otros aspectos como el retraso en la edad de jubilación.
Por géneros la brecha salarial es una preocupación importante para una de cada dos trabajadoras, aunque el resto de aspectos son similares, con cierre de empresas, salarios no acordes a su experiencia o posibilidad de pérdida del empleo o la falta de reconocimiento de su labor profesional. Hay cierta distorsión por géneros, pero esencialmente los temas son comunes.
Para los más jóvenes perder el empleo es su principal inquietud con la crisis del COVID. Es lógico puesto que en muchos casos tienen puestos menos consolidados, donde muchos están empezando en el mercado laboral. En este sentido también muestran su preocupación por el SMI, ya que muchos de ellos acceden al empleo con esta retribución.
Lo cierto es que las perspectivas no son buenas en lo que respecta a la recuperación económica, al menos en los próximos seis meses que van a ser muy duros en muchas empresas y hogares. Especialmente aquellos que dependían en mayor medida del turismo o de la masificación al estar situados en calles comerciales normalmente abarrotadas de clientes potenciales y ahora mucho más despejadas.
Además en muchos casos se está produciendo un efecto dominó que merma los ingresos en todos los sectores, de manera que la crisis económica llega a afectar a muchas empresas viables y solventes, pero que han visto saltar por los aires sus previsiones económicas y en muchos casos se han tenido que endeudar para hacer frente a sus gastos fijos ante la falta de facturación.