Esta mañana el secretario de Estado de la Seguridad Social y Pensiones, Israel Arroyo, se ha reunido con los interlocutores sociales, en el marco del diálogo iniciado tras la aprobación en el Congreso de las recomendaciones del Pacto de Toledo, hoy centrado en las medidas relativas al trabajo por cuenta propia. El tema a discutir es la cotización por los beneficios que tiene cada autónomo. Y parece que hay avances con nueva propuesta de trece bases de cotización a elegir para pagar por ingresos reales.
En la reunión han estado presentes responsables de CEOE, Cepyme, UGT y CCOO, así como la vicepresidenta ejecutiva de ATA, Celia Ferrero, el presidente de UPTA, Eduardo Abad, y la secretaria general de UATAE, Mª José Landaburu. Se trataría de que los autónomos puedan cambiar trimestralmente de bases para ajustarla a sus rendimientos.
¿Dónde está la novedad si esto es algo que ya se puede hacer? Básicamente en que cada año enviarán a la Tesorería de la Seguridad Social sus rendimiento reconocidos, es decir, se cruzan datos con Hacienda y en función de ellos se comparará con las bases de cotización provisionales y se realizará una liquidación, que puede tener resultado de devolución o a ingresar.
La duda que surge es de qué año estamos hablando, porque si el del año en curso será complicado determinar cuánto están ganando. Saben cuando han ingresado, pero no su beneficio real. En todo caso se trata de un primer acercamiento. Hay que tener en cuenta que esta propuesta sería para poner en marcha de cara a 2022.
En todo caso las asociaciones de autónomos UPTA y UATAE apuestan porque se ponga en marcha con la máxima celeridad. Sin embargo ATA considera que la propuesta todavía está muy verde y el acuerdo irá para largo. Esperemos que no quieran dilatarlo más de lo que sería aconsejable para tener el sistema listo a final de año.
Lo que si ha quedado claro es que los autónomos societarios si estarían dentro de este sistema, así como aquellos que tributan por estimación directa o estimación objetiva y atribución de rentas. Otros colectivos están todavía pendientes de determinar, como sería el caso de familiares colaboradores.
Con los datos de 2019 serán un 46% de los autónomos, que tienen rendimientos por debajo del SMI los que pague menos o se queden igual en el peor de los casos. Otro 54% tendrá que pagar más por su cotización. También afectará a la tarifa plana, que ahora mismo con este sistema en marcha dejaría de tener sentido.
Imagen | Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones