La covid-19 ha tenido impacto en todos los ámbitos de nuestro a día a día, y el ámbito laboral no iba a ser una excepción. Sin embargo, y aunque la EPA ha registrado un nivel de desempleo en mínimos históricos, lo cierto es que el salario de los trabajadores no se ha visto tan afectado.
Así lo refleja, al menos, el último Monitor Adecco de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo, que afirma que el salario medio español sigue creciendo, en concreto, a un ritmo de un 1,5 por ciento en términos interanuales, alcanzando los 1.700 euros brutos al mes, un nuevo máximo histórico.
Con todo, este aumento supone un crecimiento a un ritmo inferior al del año anterior, que había crecido un 2,2 por ciento respecto a 2018, y sigue estando un 22 por ciento por debajo del salario medio de los países de la Unión Europea, donde el trabajador medio recibe 2.172 euros brutos mensuales.
Por comunidades autónomas, Baleares sigue siendo la región que reúne las mejores condiciones para trabajar en nuestro país, con 6,9 puntos sobre 10, seguida a centésimas por la Comunidad de Madrid -que escala 4 posiciones- y la Comunidad Valenciana (6,7 puntos). Cataluña (que hace un año era la segunda mejor autonomía para trabajar) queda cuarta con 6,5 puntos.
Impacto sobre jornadas a tiempo parcial
La covid-19 se ha cebado especialmente sobre los contratos laborales de los trabajadores con contrato a tiempo parcial. De hecho, y por primera vez en los últimos nueve años, hay menos de 2,5 millones las personas que trabajan a tiempo parcial en España, un 15,8 por ciento menos que hace un año.
Es decir, casi 1 de cada 6 empleos a tiempo parcial han sido suprimidos a lo largo de los últimos doce meses, especialmente en los meses más intensos de pandemia. Así, la proporción de ocupados a tiempo parcial en el total de ocupados ha caído al 14,2 por ciento, 5 décimas menos que hace un año y el dato más bajo en ocho años.