Hay muchos aspectos que los propios trabajadores pasan por alto en su trabajo. Factores como la puntualidad, la imagen que se transmite con la ropa o el look, o sucesos acaecidos en Caprabo y el Chiki - chiki hacen que pongamos el grito en el cielo, unos a favor y otros en contra.
¿Qué pensaríais si por llegar seis minutos tarde a vuestro trabajo os condenan a dos años de prisión? Inicialmente os parecería cuanto menos, una medida absurda, surrealista, abstracta, excesiva e inconcebible...
pero ¿qué pensaríais si además os digo que fueron cuatro enfermeras que a consecuencia de su retraso, se provocó una demora en una intervención quirúrgica de cesárea con resultado de parálisis cerebral para el recien nacido?
Creo, y aún a riesgo de calificarme como un extremista, radical o demás adjetivos que se os antojen, la mayoría de los trabajadores no son ni consecuentes, ni entienden la propia responsabilidad del trabajo que llevan a cabo.
Valga como ejemplo, que no juzgo a estas cuatro compañeras que se fueron a comer juntas, ni tampoco su labor profesional que puede ser intachable, pero errores de planificación tan graves no se pueden permitir en ningún tipo de trabajo.
Hasta que toda la sociedad en general no adquiera un compromiso de responsabilidad laboral mucho más elevado, así como conciencia por el propio puesto que desempeñan, noticias así van a seguir empañando los titulares de prensa.
Vía | El País.
Imagen | Loading21 el Flickr