Según UPTA, y a propósito de los datos de la EPA, puede haber un número importante de trabajadores autónomos que siguen cotizando a pesar de no mantener una actividad continuada con el objetivo de no evitar perder sus derechos consolidados.
Los datos de la EPA ya hacían sospechar a numerosos colectivos, entre los que se hallaba la UPTA. Se daba la circunstancia que, mientras el número de trabajadores por cuenta propia había sufrido una caída de 20.300 trabajadores hasta los 3.014.300 personas, los registros de la Seguridad Social contabilizaban 3.059.000 autónomos, una desviación de casi 45.000 trabajadores.
A pesar de ser indicadores diferentes, la desviación en más de 40.000 autónomos entre los datos de la EPA y los datos del paro registrado puede tener que ver con esta circunstancia. Los autónomos que cesan su actividad renuncian a darse de baja en la Seguridad Social, pagando la correspondiente cuota mensual, para evitar perder sus derechos adquiridos en el futuro.
En la misma línea se ha posicionado la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae), que considera que esta caída de autónomos es un jarro de agua fría para el colectivo, tras las expectativas de aumento del trabajo que sugerían los últimos datos de afiliación. En concreto, señalan que la caída anual se ha duplicado en relación al trimestre anterior (del 0,3% al 0,5%) cuando se esperaba que la caída anual se fuese moderando y no incrementando.
Si a estos datos le sumamos que muchas estadísticas de trabajadores por cuenta propia son engañosos, al estar obligados por la empresa a formalizar un contrato mercantil en lugar de un contrato laboral, no ha podido haber un análisis peor desde el punto de vista de los trabajadores por cuenta propia.
En Pymes y Autónomos | La subida de la base mínima no afecta a todos los autónomos Imagen | Daquella Manera