Llevo una semana con pensamientos oscuros. Todavía falta para que mi regla haga acto de presencia y ya arrastro seis días sin dormir, tengo una ansiedad que me oprime el pecho y me siento enfadada con el mundo. Antes todo se concentraba en una frase "estás con la regla", desde hace años tiene un nombre: trastorno disfórico premenstrual y a algunas mujeres les arruina la vida laboral y personal.
Como mujer, he tenido que oír a otras decir que también tienen la menstruación y eso no les impide hacer una vida normal, así que partiendo de esa base resulta complicado tratar este tema.
A Ucrania llegaba comida y objetos básicos pero no compresas
En Ucrania, hasta que cayeron en ello, las mujeres debían usar paños y tenderlos ante los demás como si hubiéramos retrocedido en el tiempo y con ello, sentir vergüenza por mostrar algo tan íntimo y natural, al no contar con un producto básico de higiene.
En el caso del trastorno disfórico menstrual, hablamos de mujeres que no sólo ven resentida su vida laboral, también la personal. La principal diferencia entre el Síndrome Premenstrual (SP) y el TDPM es la intensidad de los síntomas.
El trastorno disfórico premenstrual (TDPM) es una forma grave, a veces incapacitante, del síndrome premenstrual. Aunque comparten síntomas, el trastorno disfórico premenstrual causa cambios intensos del estado de ánimo que pueden interrumpir la rutina diaria, faltar al trabajo, cancelar compromisos… Lo sufren alrededor de un 8% de las mujeres.
La menstruación, un tema tabú porque nadie quiere formar parte del club del sexo débil
Durante décadas la menstruación estaba ligada al histerismo, a cuentos chinos por parte de las mujeres para que nos mimaran y nos ofrecieran chocolate (cuánto daño ha hecho el cine norteamericano) . Pero si nos lo tomamos en serio, la salud mental está en juego todos los meses en una parte de la población que decide no faltar a su puesto de trabajo.
Conozco a mujeres que trabajan en fábricas y deben explicar el motivo de ir al baño, estamos finalizando 2022 y a otras féminas les resulta llamativo que una persona con una regla abundante y dolor insoportable, aún tomando medicación, deba hacer tantos viajes al aseo durante su horario laboral.
Alrededor de un tercio de las mujeres que menstrúan sufren fuertes dolores, según la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia. En la actualidad, la baja menstrual sólo se ofrece en un pequeño número de países de todo el mundo, entre ellos Japón, Indonesia y Zambia.
Discriminación positiva o un problema de salud mental que afecta a las mujeres
Soy la primera que apuesta por una igualdad real. Es decir, si he de cargar con peso, realizar trabajo o tareas 'propias' de hombres, ahí estoy, si hay que cuidar de un familiar y compaginarlo con trabajo, ídem. Pero todavía existe ese asunto llamado 'discriminación positiva'. Y muchos no queremos que nos regalen nada por ser mujer u hombre.
Sin embargo, si cuentas con un diagnóstico y una semana previa a tu periodo te encuentras mal pero a pesar de ello, no faltas a tu puesto de trabajo, ¿Cómo es posible que ahora nos tomen en serio? ¿Las empresas se lo pensarán antes de contratar a una mujer?
Las leyes, llegan tarde y lo peor es lo mal que se explica el problema.
Tener la regla no te incapacita, al igual que un embarazo, pero como en todo hay excepciones. Al igual que un embarazo de riesgo existe, también la menstruación puede impedir el desarrollo laboral normal en una mujer. El dolor no es el mayor de los problemas de una mujer con TDP, sino su estado de ánimo que va más allá de una simple tristeza.
La ansiedad y la depresión van de la mano y hasta que dan con ese problema andas dando tumbos entre frases hechas y jornadas donde tu productividad se ve resentida.
Si a esto le unimos también un dolor insoportable y una irritabilidad difícil de manejar, yo no me alegro de ser mujer y detesto esos anuncios surrealistas que en absoluto reflejan el drama que viven algunas mujeres. Sería interesante hablar desde el conocimiento y la ciencia de estos asuntos que afectan a la vida laboral y personal.
La idea de pedir bajas falsas está ahí, pero quiero creer que los facultativos saben diferenciar entre una mujer que cuenta con un historial médico y es honesta, de otra que busque escaquearse de sus responsabilidades.