Muchas pymes y autónomos se han visto arrastrados a una situación de desesperación por culpa de los retrasos de las administraciones a la hora de pagar sus deudas. Mientras se estudia el montante total de estas facturas sin cobrar, la administración ya ha adelantado que se establecerá un sistema de quita por el que aquellos que perdonen parte de la deuda, tendrán prioridad a la hora de recibir sus pagos.
De esta manera, las opciones para muchos proveedores se minimizan pues su supervivencia depende en gran medida de estos cobros, aunque posiblemente ya han pagado el IVA correspondiente. A efectos prácticos se encuentran con una administración, que aprovechando su penosa situación, les invita a cobrar menos de lo adeudado si quieren hacerlo rápido.
Puede que las empresas prefieran que se atendieran antes a los pagos de mayor cuantía ya que son los más comprometidos, pero jugando con la necesidad de los proveedores se apuesta por "el que más perdone, antes cobra" (sin olvidar que la antigüedad será otro criterio).
¿Valdrá si les digo lo mismo a los míos? No creo... y si además tenemos en cuenta que muchos de los contratos con las administraciones se han realizado con unos márgenes irrisorios, podemos estar hablando de asumir el mal menor, pero un mal.
Se lanzarán varias fases de pago y se fijará el descuento mínimo que podrán realizar los proveedores para cada una de ellas, según nos informa el Real Decreto-ley 4/2012 publicado en el BOE. Parece una bonita subasta...
¿Un favor a los bancos?
Aprovechando que la deuda española cuenta actualmente con un interés bajo, se plantea organizar un consorcio entre el Instituto de Crédito Oficial y las entidades financieras. Estos pagos no incrementarán las cuentas públicas de gasto sino las de financiación, ya que se realizará mediante la emisión de deuda pública avalada por el ICO (lo cual no significa que no aumentarán las necesidades de financiación nacional).
Esperamos a que se descubra el mecanismo definitivo, pero todo apunta a que los proveedores cobrarán un adelanto por las facturas adeudadas (o el total menos el importe que se quiera perdonar), traspasándose la deuda a los bancos. De esta manera, estas pasarán a ser los nuevos dueños de las mismas hasta que sean pagadas por las administraciones.
Es probable que este dinero se proporcione a las empresas con un interés superior al 1% que pagan los bancos al BCE por el mismo, seguramente del 6%. Sumado a otras comisiones adjuntas a las operaciones, podrían ser un buen negocio para los bancos. Eso sí, los proveedores podrán exigirle a las administración que asuman estos costes una vez satisfechos si se cumplen los requisitos.
Todavía tenemos que esperar para conocer el mecanismo, pero de momento queda claro que hay que tener mucho cuidado con las operaciones realizadas con las administraciones, pues generalmente nos piden grandes esfuerzos, bajas rentabilidades y cobros demorados.
Ahora vemos que incluso nos podemos ver "obligados" a perdonar parte de la deuda si estamos en una situación desesperada. Los proveedores quieren cobrar, necesitan hacerlo. Puede que perdonar una parte sea el mal menor de una solución, pero todo hay que decirlo... el gobierno y los bancos se aprovecharán de la mala situación de muchas pymes y autónomos.
Pymes y Autónomos | Se sientan las bases para poner en marcha el sistema de pagos a proveedores de las Administraciones, Las pymes cobrarán en el banco las deudas de las Administraciones Imagen | Brad_Chaffee