Una de las cosas que seguro muchos de vosotros ha probado este verano ha sido una conexión de banda ancha móvil. Un módem USB que nos permita conectarnos con el portátil para repasar nuestro correo en vacaciones o atender algún asunto urgente. Pues bien una de las cuestiones que debemos analizar de las conexiones de banda ancha móvil en verano es que no funcionarán tan bien como cuando el módem se probó en vuestra ciudad de origen.
No es el primer caso, ni será el último que se sienta totalmente decepcionado por estas conexiones y desesperado ante la imposibilidad de conectarse de forma normal. La banda ancha móvil depende de la cobertura de cada zona y de nada nos servirán las pruebas que hicimos en Madrid o Barcelona, por poner dos ejemplos, donde navegábamos a razonable velocidad.
Hay que tener en cuenta que si veraneáis en un lugar que ya tiene problemas con la cobertura de los teléfonos móviles en verano, pequeños pueblos o zonas de costa que en verano soportan un número de habitantes mucho mayor de lo habitual lo normal es que la banda ancha móvil no tenga una buena cobertura ni por lo general ofrezca un buen servicio.
Si además estáis pensando utilizarla para conectaros vía remota a vuestro ordenador de la oficina o similar debéis tener en cuenta que la conexión será peor todavía. Este tipo de conexiones requieren una línea estable, que no sufra microcortes, lo que en este caso es muy habitual en la banda ancha móvil.
Hay que tener en cuenta que la banda ancha no tiene la misma implantación en todos los lugares, y conexiones que funcionaban bien en algunas zonas en otras serán prácticamente inútiles. Es una cuestión que debemos tener en cuenta si tenemos trabajo planificado y sobre todo no perder la paciencia.
En Tecnología Pyme | La banda ancha móvil no convence a las pymes Imagen | Miniyo73